La imagen que podéis ver remora otros tiempos pasados.
No es un pueblo perdido.
Lo que se ve a la fotografía es una carretera de Terrassa.
Sin pistas habéis sido capaces de averiguar de qué lugar se trata?
Parece difícil de encontrar la respuesta si no se ha conocido, porque hoy es un espacio totalmente urbanizado.
Se trata de la carretera de Rellinars.
La historia de la carretera de Rellinars
La carretera de Rellinars enlaza Terrassa con el pueblo. Durante el siglo XX se ha conocido como la carretera de Gracia a Manresa y también como la B-122. Popularmente la denominaban “la carretera del Lago”.
Actualmente, la carretera tiene su kilómetro O en el paseo 22 de Juliol, pero antes de construirse todo eran caminos dificultosos para ir a la montaña. Uno que empezaba a la riera del Palau a la derecha de Can Colomer y fue el primer camino que se adecuó para los carros, necesarios por la construcción del Pantano de la Xoriguera, en 1898. Las obras de construcción de una carretera se acabaron el 1901 al tramo de Terrassa a L’Obac. Después, el segundo tramo hasta Rellinars el 1903, y el tercero hasta Castellbell y el Vilar el 1906.
El año 1924, solo estaba adecuado hasta Can Amat de la Montaña
En el año 1924, solo estaba muy adecuado hasta Can Amat de la Montaña, una de las residencias de Alfons Sala. Aquel año, a raíz de la visita del rey Alfonso XIII a Terrassa, en un tiempo se arregló hasta el lago Gran, por si la familia real quería acercarse al Pantano. Fue necesario movilizar todos el funcionarios del Ayuntamiento, que, a pico y pala llevaron a cabo la obra.
La carretera era muy concurrida y popular principalmente los domingos pues el Pantano era un lugar de recreo, donde la pesca y el esparcimiento que ofrecía el paseo en pequeñas barcas hacían las delicias de muchos terrassenses.
