Xavi Hernàndez, entrenador del primer equipo del FC Barcelona de fútbol, repite por activa y por pasiva que el sistema de juego del equipo es el clásico 4-3-3 ofensivo. Muchos medios de comunicación no ven este dibujo tan claro y creen que el técnico de Terrassa lo que hace es apostar por un 4-2-2. Quién está en posesión de la verdad? El entrenador o los periodistas, algunos de los cuales hablan también de un 4-1-4-1, de un 3-5-2 e incluso de un 3-4-3. Y en broma, se suelta un 2-4-4, con Cristensen y Kounde por detrás y los laterales subiendo. E incluso un 2-6-2.
Un 4-3-3 con varias variantes pero el esquema es el clásico
Xavi reconoce que juega con 4 centrocampistas, pero sitúa uno en el extremo, como hacía Pep Guardiola con Andrés Iniesta. El técnico argumenta que esta variante le permite un mayor dominio de la pelota y del juego. El Barça manda y es el protagonista del partido. Xavi ama la pelota, quiere tenerla siempre, o no perderla de manera fácil. Son situaciones que ahora como entrenador y antes como jugador, no soporta. En este sentido, ha reconocido que es uno de los aspectos por los cuales se enfadaba con los compañeros, y ahora con el grupo que tiene bajo sus órdenes. Su mantra es jugar fácil. Y arriesgar solo cuando se llega cerca del área contraria, donde el peligro de contra es muy inferior. Allá hay más libertad.
En el último partido que se usó? Ter Stegen, portero; Joao Cancelo, defensa; Koundé, defensa; Andreas Christensen, defensa; Alejandro Balde, defensa; Frenkie de Jong, centrocampista; Ilkay Gündogan, centrocampista; Gavi, medio campista; Raphinha, delantero; Robert Lewandowski, delantero, y Joao Felix, delantero. En este caso, el 4-3-3 fue más claro que nunca, con algunas variantes. Kounde y Cristensen cerraban. Alejandro Balde y Joao Cancelo dos balas por los laterales, con el portugués derivando un poco hacia el medio. Y en medio, Frenkie de Jong, Ilkay Gündogan y Gavi. Delante, por la derecha Joao Félix -y marchando para adentro muchas veces-, por el centro Robert Lewandowski, y por la derecha Raphina. Cuando entraron Fermín López, Oriol Romeu, Ferran Torres, Lamino Yamal y Sergi Roberto, todo continuó igual, solo era un cambio de cromos.
Algunos jugadores con más libertad de movimientos
Ante el Getafe, el Osasuna, el Cádiz y el Vila-real, partidos de Liga de esta temporada la propuesta fue la siempre. Cierto que cuando se mira arriba hay retoques, y que hay jugadores con más libertad de movimientos, como Joao Félix, pero en base al 4-3-3. Y que hay partidos donde, en función del rival, se pide algún trabajo diferente a los laterales y a algunos jugadores. La temporada pasada ya se vio este modelo, salvo al principio, donde probó un 3-4-3 que pronto guardó en el cajón. Sí que se puede decir que el Barça es perfectamente reconocible. El técnico de Terrassa, eje sobre el cual se movía en el campo el Barça de Guardiola, ha recuperado el modelo tradicional. Un sistema que han desarrollado el maestro Johan Cruyff, Frank Rijkaard y el chico de Santpedor. Todo el mundo del fútbol sabe a qué juega el Barça, haya los jugadores que haya. El forofo quiere ganar, resultados, pero en Can Barça se va algo más allá o se añade el gusto por el fútbol que gusta. Que los resultados lleguen ya es harina de otro costal.
Xavi, en un par de años, ya se ha consolidado a la élite y ha sido nominado a los premios The Best. Quedan muy lejos aquellos tiempos en los que cobró su primero sueldo como jugador.

