El Govern de la Generalitat de Catalunya ha declarado Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN) la Masía Freixa de Terrassa, un emblema del modernismo construido el 1905 por el arquitecto Lluís Muncunill. El Govern ha aprobado la declaración este martes, según avanza la agencia ACN, así como la delimitación de su entorno a protección en la categoría de Monumento Histórico. El Centre de Documentació y Museu Textil de Terrassa también ha sido declarado museo de interés nacional, tal como solicitó el Consell General de su Consorci.
La Generalitat inició los trámites para hacer que esta obra tuviera un reconocimiento más este pasado más de octubre de 2022. Un mes antes, el septiembre, la Dirección General del Patrimonio Cultural emitió informe favorable a la incoación del expediente para la declaración de Bien Cultural de Interés Nacional, en la categoría de Monumento Histórico, a favor de la Masía Freixa y de delimitación del suyo en torno a protección.
La Masía Freixa, referencia del modernismo terrasense y del país
La Masía Freixa fue construida el 1905 como nave industrial destinada a la hilatura. El diseño de la nave era «sencillo, puramente funcional y sin voluntad de autoría o estilo arquitectónico». Posteriormente, la familia Freixa decidió transformarla en su residencia. En plena época modernista, el arquitecto complementó la nave original con una sucesión de arcos parabólicos y geometrías elípticas que lo han convertido en «uno de los emblemas más destacados y una referencia del modernismo terrassenc y del país».
El Museu Textil, museo de interés nacional
En cuanto al museo, el Consell General del Consorci del Centre de Documentació y Museu Textil de Terrassa solicitó el septiembre del 2022 la declaración como museo de interés nacional. La Ley 17/1990 prevé que el Govern pueda declarar museos de interés nacional aquellos que tengan una significación especial para el patrimonio cultural de Catalunya, como es el caso del Museu Textil.
La propuesta se fundamenta en el hecho que custodia unas colecciones textiles y de indumentaria «únicas en el territorio». En total, conserva más de 130.000 piezas que alcanzan cronológicamente desde el siglo I hasta el siglo XXI, testigos de la evolución del tejido, la indumentaria, los complementos, el hogar, la diversidad de técnicas y materias o de los diseños, representativos de varios continentes.
