Los golpes de viento son un gran quebradero de cabeza para los servicios de emergencia. Aunque el Vallès Occidental no es de las comarcas más afectadas, sí que el teléfono de emergencias 112 ha sonado hasta en 21 ocasiones este martes, día 28 de enero, hasta las dos de la tarde, por incidencias relacionadas con el viento. En Terrassa, se han registrado hasta cinco llamadas este mediodía, ninguna de las cuales ha sido grave. Con el paso del tiempo se han producido varias más, y se espera que vayan incrementando hasta la noche.
Se mantiene en prealerta el plan Ventcat de Protección Civil en buena parte de las comarcas tarraconenses, Garraf y Baix Llobregat. Una alerta que está previsto que se alargue hasta este miércoles de madrugada, por lo cual, habrá que estar atentos, sobre todo en zonas boscosas, parques y jardines.

Intervenciones en Terrassa derivadas por el viento
En Terrassa, la mayoría de servicios hasta este martes a las cuatro de la tarde han tenido que ver con saneamientos. Según fuentes oficiales de los servicios de emergencia explicaron a MónTerrassa, los Bomberos se han tenido que movilizar en varias ocasiones por toda la ciudad. Una de estas intervenciones tuvo lugar en la calle de Martí Alegre, en la esquina con la calle de la Rutlla, en el Centro sur. Hacia la una del mediodía, fueron requeridos para retirar dos placas que se encontraban a unos diez metros de altura y que podían suponer un peligro para los peatones. La zona ha sido precintada por la Policía Municipal, y la calle de Sant Domènec ha quedado cerrada durante un buen rato al tráfico, mientras se retiraban las piezas más volátiles. No ha habido ningún daño personal ni material.

Unos metros de allí, en la carretera de Montcada, pero a la altura de Pau Marsal, en el barrio de la Escuela Industrial, también se ha tenido que actuar para sujetar una cerca que estaba a punto de caer. Se ha podido solucionar con un nuevo clavo, sin mayores dificultades. Una situación similar ha ocurrido en la calle de Mare de Déu dels Àngels, en el Centro norte, donde los Bomberos han llevado a cabo el saneamiento de una fachada de una nave industrial que había perdido algunas baldosas.
El viento también se ha hecho fuerte en la rambla de Sant Nebridi, en el Cementiri Vell, donde fue necesario recortar algunas ramas de los árboles que amenazaban con caer sobre peatones y coches estacionados. Finalmente, en la calle del Doctor Calsina, en Sant Pere Nord, una vecina solicitó la ayuda de los Bomberos porque se había desprendido el brazo de un toldo. Se pudo retirar y evitar el peligro.
Seguramente, sin embargo, la más espectacular ha sido la intervención en la calle de Josep Llimona, en Poble Nou-Zona Esportiva. Aquí, los servicios de emergencia recibieron un aviso de que había caído un trozo de cubierta. Aunque no había ninguna persona atrapada, sí que dos personas habrían resbalado y resultado heridas, por lo que tuvieron que ser atendidas por el SEM. Cuatro dotaciones de Bomberos asistieron al lugar para ayudar a las víctimas y sanear la cubierta restante.