175 casos diarios de fraude eléctrico en seis meses. Este es el balance que ha hecho Endesa, a través de su filial de redes e-distribución, en el primer medio año de 2025. Esto supone, en cifras globales, más de 32.000 fraudes eléctricos detectados, o lo que sería equivalente, cada hora se descubren 7 conexiones fraudulentas a la electricidad. La compañía indica que sería el equivalente a casi 117.000 hogares.
Para la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), la manipulación de las instalaciones eléctricas es un problema en aumento en los últimos tiempos que perjudica a todos los consumidores y genera riesgos para la seguridad ciudadana. No solo se trata de un delito sino también que pone en riesgo a los vecinos que conviven con ello.
Porque detrás del fraude eléctrico hay un riesgo evidente de electrocución e incendio que puede afectar no solo a quien realiza la manipulación de las instalaciones, sino a las personas que están a su alrededor. En los últimos años, se han registrado sucesos muy graves que han provocado heridos e incluso muertes por la alteración de las instalaciones eléctricas para el robo de electricidad.
Las plantaciones de marihuana, las principales culpables
Los principales causantes de estos problemas son las plantaciones de marihuana en el interior de pisos, casas o edificios, las conocidas como plantaciones “indoor”. Estas plantaciones utilizan sofisticadas instalaciones eléctricas conectadas ilegalmente a la red con grandes consumos durante las 24 horas del día. Entre los meses de enero y junio, Endesa comunica que se han desmantelado seis plantaciones interiores al día en operaciones lideradas por las Fuerzas de Seguridad. El volumen de energía recuperado en estos fraudes asciende a 111 millones de KWH, el equivalente al consumo de más de 31.700 hogares. Esto es un incremento respecto a los datos facilitados en 2022, cuando eran 4,5 conexiones descubiertas al día.
En Terrassa, en los últimos años hemos visto cómo se han registrado numerosos casos de incendios en viviendas y naves relacionados con el cultivo de marihuana. Uno de los últimos y más espectaculares tuvo lugar el pasado mes de febrero, cuando la llamada de vecinos del barrio de Sant Pere alertaba que se estaba incendiando un edificio ubicado en la calle de Catalunya, entre la carretera de Rellinars y la plaza del Mestre Serrat. Durante el proceso de ventilación de todos los inmuebles, los servicios de emergencia descubrieron algo fuera de lugar: se escondía una gran plantación de marihuana. En el interior del piso no había nadie y el volumen de plantas que se confiscaron fue de 300.
Esto pasaba el 17 de febrero. Exactamente, cinco días después, los Mossos d’Esquadra desmantelaban una importante plantación de marihuana en Terrassa tras un operativo antidrogas en la calle de Lleida, cerca de la avenida de l’Abat Marcet. La Unidad de Investigación de Terrassa de los Mossos d’Esquadra realizó una entrada en un local donde se localizaron unas 200 plantas de marihuana. A la persona detenida se le acusó de un delito de tráfico de drogas y de fraude del fluido eléctrico.


