Clausurado un bar de Terrassa por hacer demasiado ruido. Los vecinos han recibido con alegría la decisión que el Ayuntamiento de Terrassa ha tomado este viernes, día 10 de enero, respecto a un local de ocio nocturno situado en la calle Pare Llaurador, en el barrio de Ca n’Aurell. «Por fin acabaremos con esta pesadilla», ha sido la reacción de una de las vecinas de Terrassa que puso en conocimiento de MónTerrassa los problemas que tenían por culpa de la fuerte música y jaleo proveniente del interior de este establecimiento. El propietario explica que «nos han pedido un informe y los limitadores de sonido. Tenemos 15 días para alegaciones y presentarlas».
Resultados de traducción
Resultado de traducción
Lo que es correcto es que nos han pedido un informe y los limitadores de sonido. Tenemos 15 días para alegaciones y presentar.
Han sido dos años de lucha, de quejas y trámites al Ayuntamiento y de llamadas para la intervención de la Policía Municipal de Terrassa para intentar detener lo que se había convertido «en un auténtico infierno. Bebés que no duermen, personas que han terminado teniendo problemas de salud, gente que madruga y que tiene que medicarse con pastillas porque el ruido de la música es insostenible…», relata esta vecina, que se muestra aliviada porque por fin se les haya escuchado y se haya actuado.
Incumplimiento «muy grave» de la ordenanza
La noche del viernes día 20 a la madrugada del sábado día 21 de diciembre, ante las molestias denunciadas de forma reiterada por parte de los vecinos, el Servicio de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Terrassa encargó una mediación de los decibelios. Fuentes oficiales confirman a MónTerrassa, que una vez analizado el informe de la entidad de control, «se ha detectado el incumplimiento muy grave de la ordenanza de ruidos con superación de más de 10 decibelios».
Por este motivo, este viernes día 10 de enero se ha comunicado al propietario del local ubicado en el número 15-17 de la calle Pare Llaurador que «como medida provisional» queda prohibida la actividad del bar musical. El Ayuntamiento subraya que ha quedado demostrado «el incumplimiento muy grave de la normativa de ruidos», y que hasta que no quede «acreditado» que se ha puesto solución a la problemática de ruidos y vibraciones, no se podrá reabrir.