Llegar al barrio de Vista Alegre desde el casco urbano de Terrassa no es nada fácil hoy por hoy. El acceso en coche no es complicado, peró sí hacerlo si se va a pie. Se accede por debajo del puente de la autopista C-16. No hay arcenes ni nada que se asemeje. La forma menos peligrosa es coger un camino de tierra que baja hasta la rotonda de la carretera de Olesa y de la avenida de Àngel Sallent. Pero si se quiere ir directamente a La Cogullada, por aquí se hace mucha vuelta. Y si se quiere ir recto, está la carretera de Martorell, donde los coches suben -y bajan- a una buena velocidad, y cruzar es jugarse la vida. Vecinos que llegan a pie a la urbanización creen que es el momento de encontrar una solución. Y la proponen.
Los vecinos han enviado instancias al Ayuntamiento y a la Diputación pidiendo una solución
«Somos vecinos de Vista Alegre, un barrio de Terrassa que no tiene acceso de peatones seguro para salir y entrar. Hemos hecho instancias en el Ayuntamiento de nuestra ciudad sin ninguna éxito. Dicen que la carretera Martorell en el tramo que nos corresponde no es de su competencia, sino de la Diputación de Barcelona». También hemos enviado la documentación al ente. «Y tampoco tenemos respuesta. Es cómo si se pasaran la pelota de unos a otros».
Las soluciones que propongan los vecinos para evitar la peligrosidad
Los vecinos piden que en la entrada/salida de la urbanización se pueda instalar un semáforo de botón con un paso de peatones.
«Ahora es imposible acceder con silla de ruedas o con un cochecito de niño si tienes que cruzar por el paso de peatón que tenemos más cerca, puesto que tienes que pasar por una sitio que está sin asfaltar… Un desastre!
