Terrassa inicia el proceso de investigación de los niños desaparecidos durante la riada de 1962. Será la primera vez que el Ayuntamiento asume su responsabilidad con lo que pasó aquella noche trágica y afronta de cara y en puridad que la ciudad vivió, muy probablemente, la desaparición forzosa de niños aprovechando el caos que había.
Bajo el amparo que da «la Ley estatal de Memoria Histórica para emprender procesos de estas características», el alcalde Jordi Ballart ha anunciado que se colaborará con la asociación «Niños desaparecidos» para continuar trabajando a fondo y atraer nuevos testigos, declaraciones y pistas que puedan derivar en procesos de reclamación judicial e investigación. Se busca, en primer lugar, determinar cuántos casos de niños y niñas podrían haber sido sustraídos y adoptados de manera fraudulenta -se calcula que podrían ser medio centenar- y, más allá, ofrecer a las familias que perdieron un menor la posibilidad de cerrar una herida a sabiendas de que pasó realmente.
Llegar hasta el final para saber qué pasó con los niños desaparecidos
Toda la información que se recoja se pondrá a disposición de las familias implicadas, para que puedan llevar a cabo los procesos legales si así lo desean, con las autoridades competentes, Departamento de Justicia de la Generalitat, el gobierno español u otros organismos relacionados con esta cuestión.
En este sentido, Ballart ha manifestado que «queremos llegar hasta el final, queremos saber que no hizo el régimen franquista y que dejó hacer, queremos reparar el daño moral y ayudar a las familias que tienen algún caso de desaparición a pasar de las sospechas o indicios a hechos». Y por eso, se está dispuesto a llevar los casos que se detecten a todas las administraciones superiores, incluido la europea, para «dar voz en las víctimas».
Actualmente, desde la entidad Niños Desaparecidos afirman que «tenemos muchos indicios y muchos silencios, y por eso no perdemos la esperanza. Aunque solo conseguimos que una familia encuentre un ser querido, será una buena recompensa». Continúan con la investigación de pruebas y testigos que permitan abrir nuevas vías y caminos, y ahora, lo harán con una inyección de recursos extras, gracias a una primera aportación municipal de cerca de 6.000 euros. «Es una puerta que se nos abre y que mujer sentido en todos los años de trabajo que llevamos. Tenemos la necesidad de dar voz al que pasó, y ahora tenemos una oportunidad para restituir el dolor, resentimiento y rabia de aquellas familias que perdieron un niño y que buscan respuestas», ha manifestado Anna Martínez, fundadora de la asociación.

El documental terrassense que lo aceleró todo
Desde la entidad y desde el Ayuntamiento de Terrassa se ha querido valorar el trabajo que la actriz y dramaturga de Terrassa Esther Lázaro ha llevado a cabo en relación a la investigación de los niños y niñas desaparecidos. Ella es la autora del espectáculo «