No acostumbro a hablar de recuerdos muy antiguos, pero este es tant curioso que creo que vale la pena que no quede en el olvido. El hecho es que, en fecha 6 de octubre de 1585, en un pregón de la entonces villa de Terrassa, se prohíbe blasfemar, imponiéndose una multa de 3 libras cada vez que alguien lo haga y anunciándose también que “a quien no las pueda pagar le será cortada la lengua”.
La lucha de las autoridades civiles y religiosas contra el despotricar o blasfemar es algo que ha sucedido a lo largo de los años, tal y como se podía ver en una baldosa antigua que anunciaba públicamente la prohibición de blasfemar o en un artículo del diario La Comarca del Vallès del 1907. Lo que no sé es si lo que se anunciaba en este bando se llegó a aplicar nunca en nuestra ciudad .
Antes, de insultar también se decía «blasfemar».
Una virgen perdida en un patio de Terrassa
De muy pequeño recuerdo que, en casa, mi madre me explicaba que había una vecina a la que le gustaba hacer esculturas y otras con materiales de «trencadís».
Esta señora, de la que no recuerdo el nombre, hizo varios elementos para los vecinos y en mi casa le encargaron que hiciera unos bancos y una tabla que permaneció de pie durante muchos años. Desgraciadamente, al final se rompió y desapareció tirada como escombro. De lo que nos hizo solo quedó un tipo de taburete en forma de seta que mi padre iba arreglando y pintando de vez en cuando.
Pero el hecho es que en el patio de la casa que daba en nuestro patio por el detrás había, en un rincón, medio cubierta de vegetación, la figura de una virgen de medidas reales. Yo ya casi no la recordaba puesto que estaba tan cubierta de ramas que pensaba que había desaparecido.
La sorpresa ha sido que años después el patio ha sido limpiado de basura y de árboles y la figura ha aparecido tal y como la recordaba.
En la foto la podéis apreciar tal y como se ha conservado y podéis ver que todavía queda el tejadito que la protege y el «trencadís· de detrás parece en bastante buen estado. Ignoro si representa alguna virgen en concreto pero tiene un aspecto bastante sereno e imponente, verdad?
Quizás no tiene ningún valor artístico pero es un recuerdo que me ha gustado volver a recuperar y compartirlo con vosotros.