La región sanitaria de Terrassa es la que tiene más lista de espera para pruebas diagnósticas. La Región Sanitaria de Metropolitana Norte es la zona de Cataluña más «descompensada», a pesar de ser la más habitada del país. Con una población superior a los dos millones de habitantes, que incluye varias comarcas y municipios del área metropolitana, como el Vallès Occidental, el Vallès Oriental, el Maresme y parte del Barcelonès Norte, un nuevo estudio indica que «destaca por su baja cifra de quirófanos (83) y camas hospitalarias (13,66 por cada 10.000 habitantes), en ambos casos por debajo de la media catalana».
El documento ha sido publicado este miércoles, día 2 de julio, por el sindicato Metges de Catalunya, el cual lo ha elaborado a partir de datos oficiales del Ministerio de Sanidad y de la Generalitat de Catalunya. Y entre las diversas conclusiones, destacan la «falta de planificación y equidad en la dotación de equipamientos médicos esenciales». El informe ha analizado la cantidad y distribución territorial de camas hospitalarias, boxes de urgencias, camas de UCI, quirófanos, TACs, equipos de resonancia magnética, mamógrafos y fibroscopios en diferentes equipamientos sociosanitarios catalanes.
Mamografías, el punto débil de Terrassa
Metges de Catalunya (MC) alerta sobre la «profunda desigualdad territorial» en el acceso a los servicios sanitarios, la cual se plasma, por ejemplo, en el tiempo de espera para acceder a pruebas diagnósticas. En la zona Metropolitana Norte, los pacientes pueden esperar hasta 185 días para una resonancia magnética o 294 días para una endoscopia digestiva. También es quien más lista de espera tiene en colonoscopias (124 días) o en esofagogastroscopias, con 162 días de media. A pesar de que las pruebas de imagen, TAC, RNM y mamografías tienen menos de 90 días de espera, curiosamente, es este ámbito donde se señala (por mal) un centro hospitalario de nuestra ciudad, en comparación con el resto de la región. En el resto de tablas comparativas, el Hospital Universitario de Terrassa no se destaca (ni como tiempo mínimo o máximo), siendo el Hospital Parc Taulí quien encabeza la mayoría de los rankings negativos.
En este sentido, para el sindicato, la culpa de que la región Metropolitana Norte registre las esperas medias más altas para todas las pruebas analizadas, aunque no sea la que cuenta con menos recursos, se debe «directamente al déficit de profesionales”.

Falta de profesionales disponibles
“Debemos revisar el mapa sanitario del país y el plan de inversiones para asegurar que el sistema es equitativo y accesible. Por ello, también debemos conocer con la máxima precisión posible la dotación de profesionales especializados en todo el territorio”, han remarcado Josep Maria Serra, vicepresidente de MC y coordinador del informe, y el terrassense Xavier Lleonart, secretario general de MC. Y es que uno de los problemas en que se han encontrado es que es necesario tener acceso al registro de profesionales sanitarios, un registro que la consejera de Salud, Olga Pané, ha anunciado que ya ha finalizado.
La plantilla de profesionales disponible es donde cojea la Metropolitana Norte. En otras zonas, el problema se encuentra en los servicios a ofrecer o en los equipamientos necesarios. Según los datos registrados, hay centros con procedimientos realizados y pacientes en lista de espera para los cuales se requieren unos equipamientos que no constan como disponibles en las respectivas regiones sanitarias. En este sentido, el sindicato señala dos posibilidades: «el registro es incorrecto, o bien los pacientes son derivados a terceros”. E insisten en que el sistema sanitario sufre una «profunda inequidad territorial», ya que mientras algunas regiones, como el Alt Pirineu y Aran, disponen de recursos muy por encima de su población, otras se ven gravemente infradotadas.