Una nueva manifestación en Terrassa en apoyo en el pueblo palestino ha exigido al Ayuntamiento de Terrassa que tome medidas y mueva todos los hilos que estén a su alcance. La concentración tuvo lugar ayer domingo por la tarde al Raval de Montserrat y reunió 400 personas, según datos de la entidad convocante Terrassa con Palestina, una nueva plataforma que nace para coordinar las acciones de apoyo a Palestina en la ciudad. Os ofrecemos una compilación de fotografías de la manifestación clicando en este enlace.
Desde la plataforma consideran que no basta con un comunicado subscrito por parte de la junta de portavoces: «Terrassa es una de las principales ciudades catalanas y tiene que hacer valer su capacidad de incidencia y presión hacia el resto de instituciones».
La nueva entidad terrasencse en apoyo a Palestina se ha creado a raíz de la situación de urgencia de las últimas semanas y parte de anteriores experiencias de solidaridad con la causa en Terrassa. Según apuntan, está articulada con el movimiento a nivel catalán y se ha adherido al llamamiento para romper las relaciones de complicidad de las instituciones catalanas con Israel.

Durante la concentración, se leyó un manifiesto (en catalán y en árabe) dirigido a las instituciones, incluida el Ayuntamiento. La plataforma reclama que «dejen de banda la inacción y muevan todos los hilos que estén a su alcance». Apuntan que si realmente el Consistorio cree que «los gobiernos locales tienen que asumir un rol importante en el ámbito de las relaciones internacionales para acontecer actores de paz», tienen que actuar «en coherencia con los anteriores acuerdos municipales en esta materia y no tienen que ser cómplices del Estado de Israel».

Manifiesto íntegro en apoyo a Palestina
Manifiesto de Coalición Suficiente Complicidad con Israel (CPCI) y Comunidad Palestina de Cataluña:
«Viernes Israel cortó toda comunicación con Gaza. Por el poco que llega, sabemos que Israel está bombardeando más que nunca. Israel ya ha asesinado además de 7.700 palestinas en Gaza, de las cuales 3.595 son niños. Además, se calcula que más de 2.000 personas están atrapadas bajo los escombros. Más de 20.000 heridas, que ya no pueden recibir tratamiento médico, porque israel ha cortado toda electricidad y los hospitales ya no tienen material.
El sistema médico está totalmente colapsado. Padres y madres de Gaza están escribiendo los nombres de sus hijos e hijas en los brazos. “Para que el mundo sepa”, dicen, para que sea más fácil identificarlas si las mata el ejército israelí. Mientras tanto en Cisjordania el Ministro de Interior está repartiendo rifles de asalto a colonos que no paran de atacar a palestinas y ya han asesinado además de 100 en las tres últimas semanas.
La situación sobre el terreno no para de empeorar mientras que Israel refuerza su régimen de apartheid y colonialista a todos los niveles. Ante el aumento de violencia de Israel es urgente que sigamos saliendo a las calles movilizándonos, haciendo presión a la opinión pública y exigiendo a las instituciones que paren el genocidio en Gaza y el apartheid y el colonialismo a Palestina.
Tenemos que estar al lado correcto de la historia. Las palestinas nos lo piden. Vivimos en un contexto profundamente colonial, racista y islamòfob que normaliza las muertes palestinas. Israel puerta 75 años cometiendo crímenes contra el pueblo palestino, aplicando un régimen de apartheid, colonización y ocupación, tal y como lo reconocen Human Rights Watch, Amnistía Internacional y relatores de la Naciones Unidas. Esto es gracias a la complicidad de los Estados Unidos de América (EE. UU.) y de la Unión Europea (UE). La UE sigue considerando Israel, a pesar de ser un gobierno extremadamente racista y de extrema derecha, como un socio estratégico, y los EE. UU. los aporta miles de millones de dólares en ayuda militar anualmente. Sin ir más lejos, el gobierno del Estado español ha autorizado la exportación de armas a Israel por un valor de 137 millones de euros desde el año 2000.
La Europa colonial se pone de manifiesto una vez más con la doble vara de mesurar de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, que califica los ataques de Rusia contra Ucrania de “terror”, pero apoya incondicional a Israel en su masacre del pueblo palestino y criminaliza toda forma de resistencia palestina. Del mismo modo la Europa Fortaleza se moviliza para acoger las refugiadas ucranianas mientras asedia y persigue las refugiadas no blancas del Sur Global.
Las que firmamos este manifiesto decimos: “No en nuestro nombre”.
La mayoría de los medios de comunicación amplifican la propaganda sionista según la cual “Israel tiene derecho a defenderse”, equiparando ocupado y ocupante. Una buena parte están deshumanizando el pueblo palestino que, con una mirada racista, representan como terroristas, bárbaros, animales y no merecedores de protección internacional. Así, se allana el terreno para un genocidio.
La historia nos ha enseñado “nunca más, en ninguna parte, contra nadie”, y esto también incluye el pueblo palestino.
Desde el año 2007, Israel bloquea la Franja de Gaza, controlando todo el que entra y sale por tierra, mar y aire. Imponiendo un castigo colectivo todavía más fuerte, desde hace unos días Israel ha acentuado el bloqueo y no está dejando entrar agua, comida, electricidad ni medicamentos y ha bombardeado la única frontera por donde podían huir algunas palestinas. Israel bombardea con fósforo blanco zonas densamente pobladas en Gaza. La ocupación militar y la represión feroz se refuerza en Cisjordania y Jerusalén. En los últimos días Israel también bombardea Siria y el Líbano.
Las palestinas a la diáspora y los movimientos de solidaridad que se están organizando en ciudades europeas están siendo reprimidas. Hasta el punto que se están prohibiendo manifestaciones en defensa del pueblo palestino.
La Nakba (catástrofe en árabe) fue la limpieza étnica que en 1948 perpetró Israel y el movimiento sionista contra la población indígena palestina. El 75% de la población fue expulsada de su tierra, convirtiéndose en refugiadas, y más de 400 pueblos fueron arrasados. Muchos de estos refugiados fueron a Gaza. Hoy, las declaraciones explícitas del gobierno israelí anuncian de manera impune una nueva Nakba, sin que ningún estado haga bastante para pararlo. Ya hay 47 familias enteras que han sido masacradas en Gaza por los bombardeos israelíes y han desaparecido del registro civil. Tenemos que obligar los gobiernos a actuar.
Ante el genocidio que está cometiendo el Estado de Israel:
– Exigimos en el Gobierno español y en la Unión Europea un alto al fuego inmediato.
– Exigimos en el Gobierno español y en la Unión Europea el establecimiento de corredores humanitarios para que entren alimentos y medicamentos en Gaza.
– Exigimos en el Gobierno español y en la Unión Europea que suspendan el comercio de armas con Israel y la cooperación militar y de seguridad.
– Exigimos en la Unión Europea que sancione Israel para acabar con la ocupación, el colonialismo y el apartheid en el pueblo palestino y permita el derecho de retorno de los 8 millones de personas palestinas refugiadas.
– Exigimos en la Generalitat de Cataluña que deje de considerar Israel como región estratégica a ACCIÓN – Agencia para la Competitividad de la Empresa.
– Exigimos en el Ayuntamiento de Barcelona que suspenda el hermanamiento con Tel Aviv.
Y, sobre todo, exigimos en nuestro Ayuntamiento, equipo de gobierno municipal y Alcaldía que esté a la altura del momento, cosa que no ha pasado en los últimos días».

Y Terrassa con Palestina añadió al manifiesto:
«No basta con una declaración de la junta de portavoces: regidores, partidos, Alcalde. Exigimos acciones que nos acerquen a las reclamaciones que acabemos de mencionar. Su declaración obvia totalmente que estamos ante un régimen de ocupación, colonial y de apartheid que hace 75 años que dura, no de una guerra que empezó el 7 de octubre.
¡No es una guerra, es un genocidio contra el pueblo palestino! Si realmente creen que “los gobiernos locales tienen que asumir un rol importante en el ámbito de las relaciones internacionales para acontecer actores de paz”: Dejen de hacer ver que no pueden hacer más y hagan su trabajo: ¡trasladen estas demandas a las instituciones que acabamos de señalar! ¡Actúen en coherencia con los anteriores acuerdos municipales en esta materia y no sean cómplices del Estado de Israel».