La prolongación de la B-40 (Ronda Vallès, Cuarto Cinturón) para unir las dos capitales del Vallès Occidental, llamada Ronda Nord, parece un proyecto que avanza ya a velocidad de crucero desde que cambió el Gobierno de la Generalitat. Los alcaldes de Terrassa, Jordi Ballart, y de Sabadell, Marta Farrés, lo quieren lo antes posible. Y el PSC, que ahora dirige la Generalitat, lo tiene como una de sus prioridades en materia de infraestructuras, y el Presidente Salvador Illa lo ha remarcado. Las quejas de los opositores no han hecho cambiar de opinión y los que están a favor van ganando la partida.
El secretario de Infraestructuras y Movilidad de la Generalitat de Catalunya, Manel Nadal, en una visita al Centro de Conservación de Carreteras, asegura que desde su departamento se mirará con buenos ojos las propuestas que los ayuntamientos de Sabadell y Terrassa han elaborado para el trazado. No obstante, remarca que es necesario que estos planteamientos se ajusten al presupuesto para hacer posible la obra: «El convenio con el ministerio de Fomento es de 200 millones de euros, la Generalitat puede estirar un poco el presupuesto pero no multiplicar por cinco la inversión razonable», ha advertido, destacando que «no puede ir todo soterrado». Este será uno de los temas que se abordará en la reunión del Plan Específico de Movilidad del Vallès, que se celebrará el viernes 13 de diciembre.
Una vía que debe encajar en el territorio
En una visita al Centro de Conservación de Carreteras de Sabadell y Terrassa, ha destacado que hay un convenio firmado entre los gobiernos catalán y español, con un primer ingreso de encargo de gestión para comenzar a redactar el proyecto. «A lo largo de este mismo 2024 comenzaremos a tener el personal contratado para redactar y encargar el proyecto», ha apuntado.
Nadal ha subrayado: «Tendremos que ver cómo encaja en el territorio, lo hemos hecho en lugares complicados como en la Vall d’en Bas, donde hemos hecho un proyecto de variante con integración paisajística, y aquí también lo haremos y lo acordaremos con los ayuntamientos». Por ello, ha dicho, será necesario encontrar un punto de equilibrio entre las demandas de los ayuntamientos y lo que es justificable.


