Este viernes, 26 de mayo, ha aparecido una nueva calle en Terrassa. Se trata de un vial que da continuidad en la calle San Sebastián y llega hasta la calle Escudé, pasada la carretera de Rubí, en el barrio del Siglo XX. Este vial es de uso «restringido», según han dicho en Món Terrasssa fuentes municipales. Aun así no se ve por ahora ningún tipo de sistema de control para evitar el paso de vehículos no autorizados. La calle ha surgido de la reurbanización de la pastilla de la antigua Sala y Badrinas, y ha tardado más de lo previsto a abrirse por el traslado forzoso de una estación eléctrica de Endesa situada en medio.
Vecinos se han acercado a
Una gran pastilla que cobrará vida
El Plan de Mejora Urbana de transformación de la antigua fábrica Sala y Badrinas, situada en el barrio del Siglo XX, en una pastilla que tiene 30.692 m² de superficie. El proyecto de urbanización contemplaba el estudio de descontaminación del terreno, los escombros de las naves que son incompatibles con el planeamiento y movimiento de tierras; la pavimentación de calles y aceras; la adecuación de los servicios existentes y la creación de nuevas redes (alumbrado público, abastecimiento de agua, electricidad, gas, riego, fibra óptica, etc); la recogida lateral de residuos; la instalación de mobiliario urbano y jardinería, que incorpora una zona de juegos infantis accesibles e inclusivos, el aumento de zonas de arbolado en viales y espacio interior y la señalización (vertical y horizontal). También la rehabilitación de la chimenea Sala y Badrinas para incorporarla al espacio público.
Dentro de esta pastilla también hay de ir la nueva instituto-escuela Sala y Badrinas, actualmente en barracones a la carretera de Rubí. Parece pero que los trámites no avanzan como se había previsto. Ha habido molidas quejas desde la AFA y desde la plataforma Pepeta por los atrasos que está sufriendo la licitación y el inicio de la construcción de la futura equipación educativa.
