Las calles de Galileo y Arquímedes continúan buscando soluciones ante la gran cantidad de vehículos que circulan diariamente. De momento, pero, por falta de consenso, quedan descartadas tres propuestas que se habían planteado: Reabrir la rambla de Ègara, cortar el tráfico en un tramo de la calle Galileo, y permitir la circulación de vehículos que salen del parking del Progreso por la calle Columella. Así lo ha informado el Ayuntamiento de Terrassa, que se ha reunido esta tarde de jueves con el vecindario y comerciantes de la zona para presentar nuevas propuestas.
La reapertura de la rambla, la propuesta con más controversia
La apertura de la rambla de Ègara al vehículo privado fue una de las propuestas que generó más controversia. La idea era permitir la circulación general de vehículos por la Rambla en una franja acotada diariamente, de 7:00h a 9:00h. El Consistorio creyó que era «bastante viable», en palabras del regidor de Territorio y Sostenibilidad, Xavier Cardona, pero no ha sido vista con buenos ojos por parte de algunas asociaciones y colectivos.
Antes del cierre de la rambla ahora hace 15 años, circulaban casi 30.000 vehículos diarios, según cifras proporcionadas por el Ayuntamiento. El cierre hizo que aumentara el tráfico en las calles de Arquímedes y Galileo, que pasaron de 8.400 y 9.900 vehículos en el día, respectivamente, a unos 15.000 cada uno, aproximadamente. Actualmente, por estos dos viales pasan casi 10.000 vehículos ael día (9.900 a Arquímedes y 9.300 a Galileo), que son intensidades similares en el momento previo al cierre de la rambla.
Cardona atribuye este retorno a cifras de antes del cierre de la Rambla a un aumento del uso del transporte público. A pesar de la reducción, el volumen de vehículos que circulan por Arquímedes y Galileo continúa siendo muy elevado y las calles están saturadas.

El corte de tráfico en la calle Galileo y la circulación de vehículos en la calle Col·lumela, también descartado
Una de las otras propuestas descartadas es el corte de tráfico en la calle de Galileo, entre la calle de Pare Llaurador y la calle Volta. Lo que planteó el Ayuntamiento era un corte físico con barreras tipos New Jersey durante dos semanas (24 horas en el día). Se ponía cartelería similar a la que se colocó durante las obras del pasillo de peatones el abril del 2023, pero no se harían excepciones para vecinos y comerciantes de aquel tramo, que tendrían que acceder desde la plaza Freixa y Argemí en doble sentido.
La tercera propuesta que ha quedado descartada ha sido permitir la circulación de vehículos que salen del parking del Progrés por la calle Columella, que actualmente está restringido a vehículos autorizados. Actualmente entran y salen unos 500 vehículos del parking de la plaza, y se desconoce qué destino tienen al salir. Asumiendo que un 50% quisieran ir hacia el sur, el Ayuntamiento calculó que se tratarían de unos 250 vehículos que podrían utilizar la calle Columella.
Alternativas para descongestionar Arquímedes y Galileo
Después de que estas propuestas quedaran descartadas, el Ayuntamiento ha planteado otras alternativas.
Permitir la circulación en sentido norte por la Rambla a los vehículos que salen del parking del Mercado
Una de las propuestas es permitir la circulación en sentido norte por la Rambla a los vehículos que salen del aparcamiento del Mercado. Actualmente los vehículos que salen del aparcamiento del Mercado y se dirigen al norte de la ciudad lo hacen a través de la calle Arquímedes pasando por Pare Llaurador). Habilitando que los vehículos provenientes del aparcamiento puedan seguir Rambla arriba pasando por ante el Mnactec, se liberaría tráfico a Arquímedes. Ahora bien, esto podría afectar a la puntualidad, frecuencia y calidad del servicio de transporte público.
Semáforos en ámbar, más tiempo en verde, y suprimir el doble carril o un paso de peatones al cruce de Galileo con Pare Llaurador
Para mejorar la fluidez de los vehículos, proponen aumentar los tiempos de verde por los vehículos a todos los semáforos de ambas calles. El Ayuntamiento también ha planteado incorporar semáforos en ámbar intermitente en el entorno de la plaza del Progrés (propuesta estudiada y viable técnicamente). La idea es suprimir funcionalmente los semáforos del entorno de la plaza, pero de manera preventiva y por no desprotegir los peatones, se propone dejarlos en ámbar intermitente.
El mismo plantean al cruce entre las calles Galileo y Pare Llaurador, ahora mismo en estudio. En este cruce, también se proponen dos opciones: Suprimir el doble carril de giro a la derecha desde Galileo hacia Pare Llaurador o suprimir el paso de peatones que queda a la parte inferior de la calle, junto a la Farmacia Palà Vilarrasa, a pesar de que ambas opciones presentan algunos riesgos que se tienen que evaluar.
Re-diseño de la cartelería de orientación, recomendación y restricción
El Consistorio también plantea rediseñar la cartelería (estudiada y viable técnicamente). Muchos terrassencs ya se saben los recorridos, pero la señalización «no es bastante clara para los que no tienen los hábitos adquiridos», ha dicho Cardona. Se reforzará la señalización vertical de orientación, de recomendación otras vías principales (incluyente B-40) y de limitación de la longitud de los vehículos.
Mejora de la DUM
Una de las previstas a medio plazo es la mejora de la DUM. «Hace unos meses se adaptó la cartelería por cuando entre en funcionamiento la aplicación SPRO, que servirá para controlar y agilizar operaciones de distribución urbana de mercancías», explican. Con esto se quiere controlar la ocupación por parte de vehículos no autorizados y agilizar las operaciones de carga y descarga.
Convertir el urbanismo táctico en la ampliación definitiva de la acera en obra
Aparte, también hay un anteproyecto para reurbanizar una de las aceras en la calle de Arquímedes en el tramo entre Antoni Torrella y Volta. Se quiere eliminar el pasillo verde para consolidar la ampliación de la acera en obra e incorporar bancos y vegetación, con el objetivo de hacerlo más amable, más pacificado y más verde.
Entre otras propuestas, también entran la remodelación de la Rambleta del Pare Alegre con una nueva rotonda para dirigir el tráfico a la Ronda de Poniente, y un futuro enlace a la B-40 para acceder también a la Ronda de Poniente.

