Con motivo del Día Internacional de la Prevención de Incendios Forestales, que se celebra hoy, 18 de agosto, la Diputación de Barcelona ha hecho un llamado a la «responsabilidad colectiva» para prevenir incendios, tanto en verano como durante todo el año. La corporación recuerda que 9 de cada 10 incendios con causa conocida tienen origen humano, ya sea de forma intencionada o por imprudencias y accidentes. Por este motivo, mediante la Oficina Técnica Municipal de Prevención de Incendios Forestales y Desarrollo Agrario, la Diputación despliega una estrategia integral para enfrentar el incremento del riesgo derivado del cambio climático. Esta se basa en tres grandes ejes; la gestión forestal estratégica, la mejora de las infraestructuras de prevención y la concienciación ciudadana.
En cuanto a la gestión forestal estratégica, se actúa en zonas especialmente vulnerables con el objetivo de reducir la carga de combustible en los bosques y proteger los núcleos habitados. «Las actuaciones se desarrollan mediante dos programas complementarios: uno centrado en la restauración y mejora de bosques en áreas de gestión prioritaria, y el otro en la creación y mantenimiento de franjas de protección alrededor de núcleos y urbanizaciones. Estas franjas actúan como cortafuegos y contribuyen a minimizar el impacto de los incendios en entornos residenciales», explican desde la Diputación. Paralelamente, también refuerzan las infraestructuras básicas para la extinción, como la red de caminos forestales y los puntos de agua, para garantizar una respuesta rápida y eficaz de los equipos de emergencia.
Además, la Diputación de Barcelona también ha querido recordar una serie de consejos básicos para prevenir incendios forestales. Entre las principales recomendaciones destacan: evitar las barbacoas, utilizar con precaución herramientas de trabajo del campo, controlar los petardos y otros elementos que generen chispas o explosiones, y extremar las precauciones en trabajos forestales y agrícolas. También recomiendan mantener los jardines seguros, con árboles separados por más de 6 metros y una limpieza adecuada del sotobosque; evitar los vertidos de residuos y no estacionar en los márgenes de los caminos y carreteras.
