Llega el verano y eso es sinónimo de piscina, especialmente cuando sufrimos las altas temperaturas como estos últimos días. Este sábado, día 21 de junio, se abre la temporada de los baños públicos en Terrassa, y se prolongará hasta el 31 de agosto, con horarios adaptados en dos turnos, como ya se implementó durante la pandemia. Aunque técnicamente no se consideran un «refugio climático», sí que son considerados un «elemento clave durante los meses de calor», como ha recalcado el alcalde Jordi Ballart en el acto de presentación de las medidas emprendidas para «proteger y asegurar el bienestar de la ciudadanía».
Las piscinas permanecerán abiertas de 10.30 a 14.30 h y de 15.30 a 19.30 h; y según ha manifestado el gobierno municipal, las tarifas se mantendrán como el año pasado. Los menores de seis años tendrán entrada gratuita, y se facilitará el acceso a los niños y jóvenes de los campamentos de verano. Las entradas se podrán adquirir a través de la página web con tres días de antelación al momento en que se quiera hacer uso de la instalación y a partir de las 21 h. Además, las entradas también se podrán comprar en las mismas taquillas de las piscinas, aunque dado los límites de aforo se recomienda hacerlo con antelación.
Actuaciones de reparación y mantenimiento en las piscinas
El año pasado, los usuarios de la piscina del Parc de Vallparadís no se mostraron muy contentos con el aspecto que esta tenía. Las quejas por la suciedad dentro del agua y por una zona de descanso poco confortable fueron la tónica de todo el verano. Desde el gobierno municipal atribuyeron este hecho al perjuicio causado por la sequía y la imposibilidad de limpiarla a fondo debido a las restricciones.
Justo al acabar la temporada de baño, el Ayuntamiento anunció que estaba previsto hacer un plan de choque para poner a punto las piscinas para este 2025. Y así ha sido. Desde el pasado mes de enero, se han realizado diversas actuaciones en todas las piscinas municipales de Terrassa. A principios de año se vaciaron las instalaciones y una empresa especializada pudo realizar las tareas de mantenimiento necesarias y afrontar la reparación de los desperfectos producidos durante los dos años en que las piscinas no pudieron ser vaciadas.
Ballart ha explicado que en la piscina de Vallparadís se han realizado trabajos de reparación en la zona de playa, para arreglar los daños que había en el pavimento perimetral del vaso de la piscina. También se han sustituido algunas de las baldosas de una parte del vaso que presentaban un desgaste mayor. Además, se ha replantado el césped del recinto con una variedad de semillas que requiere menos consumo de agua y, por tanto, una mucho mejor conservación en comparación con la que había hasta ahora.
En cuanto a la piscina de Sant Llorenç, se ha procedido a instalar un enlosado en el fondo de la piscina, después de que se detectaran algunas deficiencias, mientras que en la zona de planta, se ha instalado 200 metros de césped artificial. En lo que respecta a la piscina de La Maurina se han realizado diversas actuaciones para asegurar el buen estado de las juntas, de todos los grupos de impulsión y de las arquetas. En este caso, se ha hecho un mantenimiento preventivo para garantizar el buen funcionamiento de la piscina.
Punto de agua para la Fiesta Mayor
Finalmente, también relacionado con el agua, Ballart ha avanzado que se pondrán a disposición de la ciudadanía todas las fuentes municipales que se encuentran dentro de los refugios climáticos, para que así todos puedan «tener un acceso fácil y rápido a puntos de agua potable». Y como novedad destacada, para la Fiesta Mayor se instalará un punto de agua en el Raval de Montserrat, en el cruce con la calle de la Unió. «Un elemento que permitirá a la gente refrescarse durante estos días de más actividad y más afluencia de público en nuestras calles», ha dicho.