Sabéis qué pasó el 22 de julio de 1872 en Terrassa? Por esta razón una de las principales vías de la ciudad lleva este nombre. El 22 de julio de 1872, una partida de 500 carlistas encabezada por Joan Castells llegó en tren y atacó la ciudad para recaudar la contribución de la villa al esfuerzo de guerra, pero las autoridades se negaron al pago y en el asalto en el ayuntamiento, en el que obtuvieron un botín de seiscientas pesetas, los asaltantes perdieron siete hombres y los defensores, dos. Fue un conflicto armado que enfrentó las tropas carlistas y las liberales, en el marco de la Tercera Guerra Carlista, justo después de la abdicación del rey Amadeo I.
Una partida de 600 hombres, comandados por el general Joan Castells Rosell
Una partida de 600 hombres, comandados por el general Joan Castells Rosell, llegaron el día 22, a las 7 de la mañana, con un tren que habían secuestrado a la altura de la riera de Gaià, y que los dejó en la Estación de los Ferrocarriles del Nord. Se dividieron en 2 grupos y mientras unos bajaron por la calle del Nord, los otros lo hicieron por el del Mas-Adei. A pesar de informar a los aldeanos que no venían a hacer la guerra sino a cobrar, el segundo grupo fue recibido a tiros, mientras los aldeanos tocaban las campanas a Sometent y cerraban las puertas de las casas.
El teniente de alcalde, Jaume Jover y Marquet
El teniente de alcalde, Jaume Jover y Marquet, de 46 años, estaba trabajando de panadero en su obrador de la calle de Gavatxons número 3, cuando sintió la campana. Inmediatamente cogió un arma y, vestido de panadero, pidió ayuda a su amigo, Valentí Alagorda y Mas que lo siguiera y ambos se dirigieron al arrabal para salvar el dinero de la Vila.
Allí ya había un grupo de carlistas que ocupaba el Ayuntamiento y, sin ningún tipo de miedo, abrió fuego. Los Carlistas contestaron con trabucos, de forma que Jaume Jover murió en el momento y Valentí Alagorda quedó gravemente herido.
Ante estos hechos, los otros sometents de la Vila la emprendieron a tiros, que salían por tejados y ventanas, obligando a los carlistas a retirarse de Terrassa, utilizando el mismo tren a pesar de sufrir en la fuga varios muertos y heridos. Alagorda murió en el hospital el día 16 de agosto siguiente, a la edad de 39 años.
Los héroes
Estos hechos los convirtieron en héroes por los aldeanos y desde aquel año y durante mucho tiempo, se celebró esta fiesta con una procesión cívica, que recorría las calles de la villa y se dirigía al cementerio para hacer una ofrenda a sus tumbas.
El 2 de septiembre de 1882 se creó una comisión encargada de la construcción de un monumento en memoria de los héroes muertos por las tropas carlistas el 22 de julio de 1872. Todavía se puede ver en los jardines que se construyeron en los terrenos del cementerio viejo.
