El servicio Bus DNit de Terrassa dispondrá a partir de ahora de un sistema de alerta para prevenir y actuar ante posibles situaciones de acoso o abuso en el interior de los autobuses urbanos municipales. La medida, que es una prueba piloto y forma parte de la nueva campaña informativa ‘El Bus, espacio seguro’, consta de un botón lila instalado en el interior del bus que se podrá activar en caso de riesgo, incomodidad o percepción de acoso.
Al presionar el botón, se emitirá una señal acústica que avisará a la persona conductora, quien iniciará un protocolo de actuación con el objetivo de garantizar el acompañamiento, la atención inmediata y la seguridad de la víctima. Según explican desde el Ayuntamiento, este proyecto se ha trabajado de manera conjunta con la Policía Municipal de Terrassa, la cual ha formado a algunos conductores y es la receptora de la alerta cuando se recibe un aviso a través del botón.
«Esta iniciativa se enmarca en una estrategia más amplia para prevenir y combatir todas las formas de agresiones y abusos en los transportes públicos, con especial atención a la violencia machista», ha asegurado la concejala de Políticas de Género, Lluïsa Melgares. Por su parte, Òscar Gómez, gerente de Tmesa, ha asegurado que “nos sentimos muy satisfechos de innovar e impulsar esta prueba piloto». «El bus dispone de cámaras de seguridad y, ahora, durante las noches, contará con un botón que activa un protocolo de atención, que nos permitirá actuar ante situaciones de acoso, bullying, maltrato o cualquier forma de abuso en general», ha añadido Gómez.
La implementación de este botón lila en el Bus DNit coincide con los actos del 25 N, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres. Asimismo, desde el Consistorio recalcan que, con esta acción, quieren reafirmar su compromiso para «garantizar espacios públicos libres de violencias machistas y para asegurar que todas las personas puedan desplazarse con libertad, dignidad y tranquilidad». Por su parte, desde Tmesa manifiestan que el botón nace con la voluntad de ofrecer un transporte público «de calidad, cercano y seguro, que garantice el derecho a la movilidad sin miedo ni discriminaciones».

