Educación ha abierto expediente ante las denuncias hechas por parte de varias familias de la escuela Mare de Déu del Carme (Karmel) sobre un cambio «ideológico» en el proyecto educativo del centro concertado. En una entrevista en la cadena SER Catalunya, la consejera Esther Niubó ha confirmado que el departamento recibió «alguna queja» sobre lo que estaría ocurriendo en la escuela y que automáticamente desde Educación se inició una investigación, en la cual «aún se está trabajando, para saber si son verdad» las acusaciones o no.
En todo caso, la máxima responsable ha adelantado que en el caso de que estas fueran ciertas, «se tendrán que parar. No son comentarios propios de un docente», en referencia a frases como «Franco hizo cosas buenas por España» o «Freddy Mercury se merecía el Sida por homosexual», que los padres han dicho que algún profesor ha pronunciado en las aulas.
🔴@eniubo, consellera d'Educació i Formació Professional (@educaciocat), sobre el cas de l'Escola Mare de Déu del Carme de Terrassa:
— Aquí Catalunya (@AquiCatalunya) April 2, 2025
🗣️"Inspecció educativa ha obert un expedient i s'està treballant. No són comentaris propis d'un docent".
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Acusaciones cruzadas entre familias y comité de empresa
Hace una semana, familias del Karmel enviaron un comunicado a los medios en el que mostraban su preocupación y malestar por lo que consideraban un cambio «ideológico» del hasta entonces proyecto educativo. Lamentaban que se ha observado «un refuerzo del componente religioso, la restricción de actividades y una mayor presencia del castellano», y denunciaban que «los valores de pluralidad, respeto y libertad religiosa que siempre han caracterizado la institución» están en peligro.
Al día siguiente, desde el Comité de Empresa de la escuela respondían a las acusaciones negando cualquier giro ultraconservador y desmintiendo que se haya «impuesto» al profesorado cualquier cambio en este sentido. Indicaban que las modificaciones que se han hecho últimamente han sido fruto «de la voluntad de mejorar la calidad educativa y del bienestar del alumnado». En ningún caso, dicen, se han convertido en una institución «sectaria», como sí han manifestado las familias.
Desde el Ayuntamiento de Terrassa, preguntados por MónTerrassa, confirmaron que desde la concejalía de Educación ya estaban al tanto de las quejas y que se ha llevado a cabo una reunión entre la concejala y el grupo de familias, y que se hará un seguimiento de las acciones que emprendan. Sin embargo, recuerdan que “no tenemos competencias” y descartan, por ahora, hacer más declaraciones.
