MónTerrassa
Uno de los edificios de la represión durante la dictadura franquista
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La comisaría general de la Policía Gubernativa, que estaba ubicado en la calle de la Iglesia de Terrassa, forma parte de una de las fichas que podemos encontrar dentro del nuevo mapa interactivo sobre la memoria histórica de Terrassa, el cual permite descubrir anécdotas e historias que han marcado nuestra ciudad desde la Segunda República hasta la Guerra Civil. Este edificio, que actualmente todavía se conserva pero que presenta un aspecto abandonado y bastante deteriorado, fue uno de los epicentros de la represión durante toda la dictadura franquista. Desgraciadamente, la ficha no adjunta ninguna imagen de cómo era la comisaría en aquella época.

Esta policía se decía gubernativa para diferenciarla de la judicial, y en ninguna parte de estar bajo la dirección de los jueces, recibía y ejecutaba órdenes directos desde las autoridades políticas. A la hora de la verdad, lo que hacía era «velar por el orden público» y, sobre todo, investigar aquellas personas que eran consideradas «sospechosas» por el régimen. Estos se diferenciaban de los grises, como se conocía de manera popular a la Policía Armada y de Tráfico, los cuales se encontraban en otra comisaría.

Según relata la ficha proporcionada por el Archivo de Terrassa, esta comisaría era especialmente temida por los militantes antifranquistas puesto que había constancia que un número bastante considerable habían sufrido torturas. Al frente, se encontraba la Brigada Político Social, y en particular, Antonio Juan Creix, un individuo conocido por sus métodos sádicos en la hora de interrogar los presos. Bartolomé Baños i Antonio Casas Cazorla, entre otros, son algunos de los testigos que se han conservado.

En esta línea, otro de los personajes más conocidos asociados a la comisaría de la Iglesia era el comisario Àngel García, que empezó a dirigirla en 1973. Hay que decir que en este caso, el hombre acabó recibiendo una querella criminal y recibió mucha presión a raíz de las torturas que inflingió a jóvenes detenidos de las JCC. Un accidente de coche, tres años después, que lo dejó muy mal en las extriminats inferiores y en un brazo hizo que pasara a estar en la «reserva». La historia también tiene presente a Aníbal Martínez, inspector en jefe de la Brigada Politico Social que fue herido durante la huelga de Laver Schappe de 1970 cuando amigos, vecinos y simpatizantes de la protesta de los trabajadores de la fábrica se situaron detrás un muro en la riera de Las Arenas y apedrearon los coches de la policía. Uno de los prdruscos tocó a Martínez, que cayó desplomado en tierra.

Para saber más:

    Por el testigo de B. Baños ver LACUEVA, J.L. – MÁRQUEZ, M. – PLANES, L.: Combate por la libertad. Memoria de la lucha antifranquista en Terrassa, 1939-1979. Terrassa, Fundación Torre del Palau, 2007, pàgs. 173-176.Por el testigo de A. Casas ver pàgs. 150-151. Y por más detalles sobre la policía local durante el franquismo, ver pág. 453.
Fotografía del edificio donde estaba ubicada la comisaría | Archivo de Terrassa

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