Los tres concejales de VOX han sido expulsados del Pleno del Ayuntamiento de Terrassa. El pasado viernes, la concejala y portavoz del partido de extrema derecha, Alicia Tomás, se presentó en la sesión ordinaria con una camiseta en la que se podía leer el mensaje de «¿Por qué Ballart silencia las violaciones de Terrassa?”, en una alusión velada a una supuesta ocultación por parte del Ayuntamiento y del gobierno municipal de las agresiones sexuales que dicen que tienen lugar en la ciudad. Ese día, el alcalde decidió suspender el Pleno, desembocando en un aluvión de declaraciones por parte de unos y otros.
Finalmente, se acordó que este miércoles, día 30 de abril, se reanudara el debate que debía haber tenido lugar entonces. Sin embargo, en esta ocasión, no solo Tomás ha aparecido con la misma polémica camiseta sino que también lo han hecho los otros dos representantes del grupo municipal. Ante esto, el alcalde ha pedido que por «cortesía» y para «no lesionar la dignidad ni el respeto de las personas» se la cambiaran.

La Policía irrumpe en la sala de Plenos
Como era de esperar, se han negado. «No nos cambiaremos la camiseta, es nuestro derecho hacer política. Seguiremos defendiendo la libertad de expresión», ha clamado la portavoz de VOX, quien ha sido replicada por el alcalde recordándole que «la democracia se basa en el respeto y en aplicar el reglamento. Con el deber y la obligación de la cortesía debida, y no en incentivar la discriminación y los discursos de odio, de hostilidad y de violencia contra alguien». El alcalde, con el apoyo del gobierno municipal, ha considerado que el mensaje supone una «lesión a la dignidad» de su persona y un ataque a la honorabilidad, como persona y como representante máximo de la institución.
Después de tres advertencias, amparándose en el Reglamento Orgánico Municipal, y de las tres negativas de quitarse la camiseta de los concejales de VOX y también de abandonar el Pleno, el alcalde ha pedido que se procediera a desalojarlos. Ha sido entonces cuando han entrado varios agentes de la Policía Municipal de Terrassa. Rápidamente los tres concejales se han levantado, han sonreído y han abandonado la sala. Ha sido la primera vez que ocurría un hecho similar en la sala de plenos del Ayuntamiento de Terrassa, y el resto de partidos políticos han calificado esta situación de «vergonzosa».
Gente del público se ha levantado con pancartas de «dictadura» y ha respondido a la escena con gritos e insultos hacia el gobierno municipal, Ballart y el Ayuntamiento. Los tres concejales de VOX han decidido no hacer uso de su derecho de poder votar, aunque sin poder intervenir, en el resto de propuestas de resolución presentadas.




