Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) deja el gobierno municipal. La sorpresa ha sido de las grandes en el mundo político local e incluso nacional. El alcalde, Jordi Ballart, no sabía nada, y tampoco algunos ex consejeros republicanos. La noticia se conoció casi a la media noche. Este lunes, la asamblea local de ERC ha avalado la propuesta del Grupo Municipal de no seguir en el gobierno de coalición con Tot per Terrassa y Junts. Hoy, a las 11 de la mañana, ante el Ayuntamiento de Terrassa, han explicado las razones.
La decisión del servicio de Movilidad del Ayuntamiento de cambiar los límites de la isla de peatones había provocado la primera ‘crisis’ dentro del gobierno de la ciudad. ERC ha mostrado públicamente su descontento ante el anuncio hecho recientemente para el teniente de alcalde Xavier Cardona. Se especulaba en las útimes horas que había sido lo detonante de la decisión de dejar solos Tot per Terrassa y Junts. E iba por aquí. «No es la ciudad que queremos».
Carencia de generosidad
Ona Martínez ha hablado de carencia de consensos, de poca generosidad, de modelo diferente al del grupo de Jordi Ballart, de avanzar en líneas diferentes, de no desarrollar como es debido un municipio verde y sostenible. A pesar de que no ha querido hacer aspavientos ni decir que se han sentido ninguneados o engañados. La isla de peatones ha sido «la gota que ha colmado el vaso». «Las formas han influido» en la decisión de plegar, ha remachado, que «no ha sido en caliente». Y en cuanto al futuro, ha afirmado que ERC hará una oposición constructiva, «no iremos a romper nada, y asumiremos la campaña de desprestigio que nos llegue… «
En cuanto al gobierno municipal, parece que no implicará demasiados cambios. Tot per Terrassa y Junts suman 13 regidores, de los 27 de la sala de plenos. «De facto», es mayoría absoluta si se descuentan los tres de Vox. Sí que algunas carteras que llevaban Ona Martínez y Pep Forn tendrán que tener nuevo responsable. ERC se sumará a la oposición y habrá que ver si optan por el diálogo o por la dureza contra el equipo de Ballart.
