El candidato a las elecciones municipales del domingo 28 de mayo por Tot per Terrassa, Jordi Ballart, ha recordado en campaña que la ciudad sufre un «agravio histórico que depende de voluntad política», todo hablante del peaje de Les Fonts y de la zona tarifaria 2, la que tiene Sabadell, y quien hace que sus habitantes tengan que gastar mucho menos dinero cuando se desplazan por Catalunya en transporte público. «Es un tema que está en todas las mesas de trabajo que tenemos con la Generalitat y tenemos compromisos que esperamos pronto sean una realidad».
«El mandato con más reuniones bilaterales»
El actual alcalde se muestra optimista y cree que ella situación se revertirá a corto plazo. En movilidad, ha reclamado que se recupere la línea que va de Terrassa al aeropuerto, un autobús que evitaba todo el juego de trenes y otros vehículos para ir al Prat a subir a un avión. “Siempre nos acusan de no estar conectados con otras administraciones por no ser sucursal de ningún partido nacional, pero este ha sido el mandato donde más reuniones bilaterales se han hecho y dónde más inversiones hemos conseguido atraer”.
Ballart ha recordado que en los últimos 4 años Terrassa ha conseguido avanzar en inversiones y compromisos, y todo esto “ha sido fruto de las buenas relaciones con todas las administraciones con las cuales nos hemos reunido.” El alcaldable se vanagloria que el gobierno que lidera es lo primero que ha conseguido un espacio exclusivo y de trabajo con la Generalitat, a través de la Comisión Bilateral. «De este vínculo de relaciones se ha conseguido cosas importantes que la ciudadanía hacía años que reclamaba, como el nuevo CABO Norte al Parque de la República, la ampliación del Cap Rambla y el Cap Sud, y la creación de un nuevo Cap y CUAP en la calle Pau Marsal.»
Ballart insiste en tres inversiones «comprometidas y pendientes, como son el gimnasio de la Escola Joan Marquès Casals y la Escola Cesc Aldea, y que la Generalitat cumpla y no atrase más el calendario de obra del futuro Instituto-Escola Sala y Badrinas. El Ayuntamiento ha puesto dinero cuando no le correspondía, ahora es el Departamento quien tiene que agilizar la obra.»