La Fiesta Mayor de Matadepera cerró este pasado domingo con gran éxito de asistencia a los actos preparados. Conciertos, exhibiciones, gastronomía y diversión fueron la tónica del evento, que reunió a más de 3.000 personas en momentos puntuales, especialmente en las noches de viernes y sábado. Una vez pasada la euforia, ha tocado hacer balance.
Los primeros en hacerlo han sido los cuerpos de emergencia, que han presentado su informe. “La valoración global es muy positiva, ya que hemos alcanzado los objetivos perseguidos de dar cobertura a todos los actos logrando que se desarrollaran con normalidad”, según han apuntado fuentes del cuerpo policial en un comunicado, los cuales han querido agradecer “la tarea y el apoyo por parte de la Brigada de Obras, agente cívico, ADF y Bomberos, Punto Lila, concejales de espacio, voluntarios, cuidadores, servicios médicos-ambulancias y voluntarios”.
La Policía Local contó para el servicio de actividades en horario nocturno con el refuerzo de los Mossos d’Esquadra. También con los vigilantes de seguridad y controladores de acceso, y con dotaciones de la Policía Municipal de Terrassa para efectuar controles de alcoholemia y drogas en la rotonda de la carretera. En total, el cuerpo municipal movilizó toda la plantilla, realizando 68 servicios y atendiendo 117 llamadas.
Cuarenta contenedores llenos de bebidas alcohólicas requisadas
“A pesar de algún incidente puntual”, han continuado apuntando fuentes de la Policía Local, “el resultado ha sido muy satisfactorio dado el volumen de gente asistente a los actos de las fiestas de noche, donde se superaron las 3.000 personas las noches de viernes y sábado en la fiesta joven y 2.000 en la Plaza de las Acacias», indican.
En este sentido, consideran que la presencia policial y las actuaciones llevadas a cabo han ayudado a reducir los daños materiales ocasionados. «No ha habido heridos graves ni daños personales a destacar y no se tiene constancia de que haya habido hurtos ni robos con violencia a las personas», dicen.
No obstante, sí que ha habido algunos casos destacables y que requirieron la intervención policial. Entre estos, destacan dos. Por un lado, un grupo de personas lanzó spray de pimienta en la pista polideportiva, justo delante del escenario donde se realizaban los conciertos, la madrugada del sábado (alrededor de las tres y cuarto de la noche). Esto provocó que varios asistentes tuvieran que ser atendidos por los servicios médicos, con escozor en los ojos, picor en la garganta y, en algún caso, vómitos. Por otro lado, la Policía detuvo a un menor de edad por una presunta agresión sexual a una chica. La víctima denunció tocamientos sin su consentimiento.
Aparte de esto, el informe resalta dos heridos leves resultado de cuatro peleas diferentes; también la asistencia médica a una treintena de personas que habían consumido excesivamente alcohol, y a la vez la confiscación de bebidas alcohólicas que llegaron a llenar una cuarentena de contenedores con capacidad para 240 litros cada uno en la zona de la Fiesta Joven durante viernes y sábado, y en cumplimiento del bando dictado por alcaldía prohibiendo el consumo de alcohol en vía pública.
