Este ha sido un tema recurrente y protagonista en los dos últimos plenos municipales de Matadepera y Terrassa la semana pasada. El cambio de la línea principal de autobuses M8 (hasta ahora M8A) entre las dos localidades, que a partir del 9 de diciembre recorta seis paradas de las ocho para finalizar su recorrido al norte de la ciudad, en la estación Naciones Unidas de los Ferrocarriles de la Generalitat, no elimina el bus lanzadera M8D cada media hora a la Estación del Norte de la Renfe de Terrassa. Así lo aseguró el concejal de Movilidad y Vía Pública matadeperense, Francesc Llobet, en el pleno del pasado lunes a preguntas de la oposición. Por su parte, concejales de la oposición de Terrassa también mostraron la misma inquietud el viernes, mientras que el teniente de alcalde de Territorio, Xavier Cardona, manifestó que se buscará que «Terrassa siga siendo competitiva en esta línea».
De hecho, Cardona anunció para los próximos días una reunión entre los ayuntamientos de Terrassa y Matadepera, Transports Generals d’Olesa -la empresa concesionaria- y la directora general de Transportes y Movilidad de la Generalitat, Susi López, para tratar el tema. Y ya se han producido otras anteriormente con la directora general y TGO cuando el Ayuntamiento de Terrassa se enteró del cambio. Una el mismo viernes pasado.

En el pleno matadeperense, el portavoz de Suma’t Matadepera y exalcalde, Nil López, preguntó si esta modificación en la línea M8 suponía eliminar el bus lanzadera a la Estación del Norte. En ese momento, Llobet le contestó que no. «Aumentamos la frecuencia de la M8 y la conexión con la Estación del Norte está garantizada con la línea M8D cada media hora», contestó el concejal de Som Matadepera, añadiendo que «no se deja huérfano a nadie de poder acceder a la estación de Renfe y la intermodalidad con los dos operadores principales de ferrocarriles». Al mismo tiempo, Llobet admitió una falta de información sobre cómo quedaba el bus lanzadera. «Debemos asumir que no se ha explicado suficientemente bien», reconoció.
Al mismo tiempo, justificó unos cambios en la línea principal que se están trabajando desde julio de 2024. «Se incrementa la frecuencia en un cincuenta por ciento porque pasamos de un autobús a la hora a, de manera alternativa, uno cada 30 o 45 minutos», detalló el concejal sobre el aumento de 16 trayectos (15 los domingos y festivos) a 25 tanto de ida como de vuelta. «Los técnicos de TGO nos dicen que el tiempo actual de desplazamiento de la línea M8A, por dentro de Terrassa, supone del orden de 30 minutos de bajada y unos 35 minutos de subida», siguió precisando. «Este recorrido es poco operativo por el centro de Terrassa y quizá responde a una época en que la conexión con los Ferrocarriles Catalanes solo estaba ubicada en la Rambla de Terrassa», quiso recordar el concejal matadeperense. Actualmente, el itinerario llega a la Estación de Autobuses de Terrassa, al final de la Rambla con carretera Montcada pasando por la Estación del Norte.
«Pretendemos ofrecer un mejor servicio y, al mismo tiempo, captar nuevos usuarios que, quizá con las frecuencias tan aisladas, no consideraban el autobús como un medio óptimo», continuó defendiendo Llobet. El equipo de gobierno también destaca que se crea una parada anterior a Naciones Unidas en el Pla del Bon Aire y que estos cambios se han consensuado con el Institut Matadepera y la escuela Montcau-La Mola, grandes usuarios de este servicio que, a primera hora de la mañana, llenan completamente los autobuses con un número total de pasajeros diarios de 800, pero un promedio de veinte por trayecto.
En este sentido, el jefe de la oposición López pidió que se consensúe con el Ayuntamiento de Terrassa diferentes opciones para mantener la llegada de la línea regular a la Estación del Norte. «Ya sea semaforizaciones o un carril preferente para el itinerario del autobús para que sea más rápido», especificó.
Críticas desde Terrassa y reclamación de otra solución
En su caso, en el Ayuntamiento de Terrassa fueron los concejales del PP María Carmen Vaya y del PSC Marc Armengol quienes sacaron el tema. «Esta reducción del número de paradas de ocho a dos afecta a muchos usuarios», se quejó Vaya preguntando al equipo de gobierno si había previsto hacer algo. «Matadepera ha pedido más frecuencia de paso y esto será a costa de la cobertura que se presta dentro de la ciudad de Terrassa», criticó Armengol. «Yo rogaría que Terrassa haga valer su peso y que no dé por buena esta solución y que, al menos, el punto de partida no sea al norte de la ciudad sino en un punto más central como la Estación del Norte, que nos parece un nodo mucho mejor intercomunicado», propuso.

En el turno de respuesta, el teniente de alcalde Cardona hizo la relación de reuniones hechas y previstas para abordar este tema con las diferentes partes afectadas y afirmó que, «con los datos», se intentará convencer de que Terrassa mantenga la competitividad de la línea. «No ha sido mala fe por parte de ninguna de las administraciones, sino que a veces las prisas no son buenas», consideró.

