Escribo esta carta del lector al diario local MónTerrassa para denunciar una situación que viví y que creo que es un maltrato, abuso de derecho y solo afán recaudatorio del Ayuntamiento de Terrassa.
Con vehículo autorizado por la AMB y con tarjeta de minusvalía, se dejó el pasado 21/09/2024 a una persona mayor con discapacidad física reconocida y en silla de ruedas frente al Museo de la Ciencia y de la Técnica de Terrassa. El coche fue multado por la cámara de vídeo que hay en la Rambla d’Ègara, según se recoge en el expediente 79250/2024, al entrar a una zona considerada restringida a los vehículos particulares.
Se presentaron alegaciones, indicando que el único motivo fue el acceso puntual a Rambla d’Ègara para dejar a una persona con minusvalía justo en la puerta del museo MNACTEC, y proceder a marcharse. Se aportaron todas las pruebas documentales, tanto de invalidez, como de que el coche ha sido dado de alta por minusvalía en la AMB. Como prueba también aportamos las entradas del museo.
Teníamos la convicción de que la señal de prohibición que indica que hay diversas excepciones a la prohibición de paso, permitía el acceso de vehículos que transportaban personas con discapacidad, como normalmente es habitual y mayoritario en Barcelona y en casi todos los pueblos y ciudades.
Pero con total insensibilidad al respecto, el Ayuntamiento de Terrassa ha desestimado todas las alegaciones que hemos presentado con el pretexto de que existe un itinerario alternativo indicado en la web del museo, y que, por tanto, se reafirmaba en la sanción considerada de «GRAVE» por haber accedido a la Rambla d’Ègara, independientemente de que haya sido acreditado que se accedió solo para dejar a esta persona con tarjeta de minusvalía y con un vehículo autorizado por la AMB.
Mi pregunta es, ¿queremos personas con esta insensibilidad al frente de las instituciones públicas?
