Laia es una voluntaria del Centre de Atenció de Animals Domèsticos (CAAD) de Terrassa. Con el apoyo del resto de voluntarios de la protectora, ha pensado escribir una felicitación muy especial para Bunny, uno de los animales que se encuentran en las instalaciones, con motivo de su 9.º cumpleaños. Esperan de este modo visibilizarlo y que haya alguna familia interesada en adoptarlo. La carta dice así:
Una condena injusta
Felicidades Bunny! Este febrero has cumplido 9 años. Estos humanos, que celebran sus cumpleaños con fiesta gorda, con regalos, con un amplio abanico de felicitaciones… Lo sentimos Bunny, l@s voluntari@s te acompañaremos durante este mes. No sabemos el día exacto en que naciste, así que te daremos lo mejor de nosotros durante todos estos días, y sabes qué? Lo haremos durante todo el tiempo que estés aquí, durante todo el tiempo que cumplas con una condena injusta impuesta por este Homo sapiens sapiens, sabio significa. Qué sabios te han rodeado…
Bunny, sentimos que alguien se encaprichara de ti: una mezcla de Pastor Belga Malinois, un dulce de caramelo a punto de boca para alguien sin ninguna emoción. Abandonada en un estado miserable, lamentable, desolador, deplorable, trágico… Y muchísimos más sinónimos.

Bunny, que llegaste y tuviste que estar un tiempo ingresada porque estabas realmente mal. Que volviste a una jaula donde no parabas de dar vueltas, por no poder tranquilizarte, por no sentirte querida, para continuar sufriendo, para ir apagándote día a día…
Bunny, que fuiste adoptada y devuelta al cabo de pocos meses, volviendo a tu jaula, a no husmear porque el estrés te consume, a volver a adelgazarte, a perder el pelaje…
Bunny, estos 9 años, por desgracia y por acto de este miserable ser humano jugando a creerse dioses del Olimpo, cogiendo vidas que sienten y sufren, y lanzándolas a los contenedores como briznas de polvo… Por culpa de nuestros semblantes, felicidades por tu cumpleaños y felicidades para cumplir años en una jaula. Lo sentimos Bunny».
