Los plenos municipales son un buen termómetro del ritmo de la ciudad, dentro y fuera de los despachos de poder. En el ordinario de Terrassa de este mes de octubre, se vivieron diferentes escenas que reflejan contenciosos ocurridos las últimas semanas y otros en plena ebullición como unas ordenanzas y presupuestos para el 2026 que han hecho saltar algunos resortes. Los vecinos de la promoció residencial Esquirols de Les Fonts, aunque no pudieron intervenir directamente, vieron la esperanza de poder terminar teniendo una conexión eléctrica digna con una declaración institucional. Sin casi discusión, la moción del PP para adaptar la nueva normativa de patinetes y bicicletas eléctricas al régimen sancionador recogió la unanimidad. Pero, hacia el final del pleno, el concejal de ERC, Josep Forn, y el portavoz del gobierno, Xavier Cardona, visualizaron esta tensión que se vive en la negociación de las cuentas para el año que viene.
Precisamente, era una moción la que llevaba el concejal Forn que se convirtió en una declaración institucional defendiendo a los vecinos de Les Fonts justo al comenzar la sesión y con la única abstención de Vox. El jefe del servicio de la secretaría general, Josep Guisado, que se jubila tras cuarenta años en el pleno extraordinario de este lunes de los presupuestos, fue el encargado de leerla. En ella, el Ayuntamiento se compromete, antes de terminar el año, a impulsar un calendario de trabajo para «acompañar y apoyar a las familias del conjunto residencial Esquirols-Les Fonts hasta que sus viviendas dispongan de las conexiones definitivas a la red eléctrica pública lo antes posible». A falta de concretarse la manera de hacerlo realidad, una nutrida representación de estos vecinos se levantaron de los asientos para aplaudir este compromiso de los grupos municipales que les da al menos consuelo ante una situación de pesadilla.

Justo antes, se había dado la bienvenida al nuevo concejal socialista, Carlos Lázaro, en sustitución de Carlota Menéndez que se había despedido en el pleno de septiembre. De hecho, el caso del director de escuela Lázaro es un regreso al consistorio porque en la legislatura pasada ya se había incorporado al grupo del PSC a mitad de mandato y ya lo conocen en las bancadas del hemiciclo. Fue un momento de bienvenida por parte de todos.
Una prórroga de autobuses interminable
Iniciado el debate, el tema estrella era la aprobación definitiva de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Terrassa, que a partir del uno de diciembre ya tendrá carácter sancionador. Pero sobre movilidad aparecieron otros temas de preocupación. Hay uno que se arrastra desde 2019. Se trata de la prórroga interminable del servicio de autobuses de la empresa mixta Tmesa. Estas prórrogas ya se habían ido haciendo desde 2009 porque estaban previstas durante diez años en la concesión, pero la decidida este viernes es la séptima consecutiva obligada a la espera de poder convocar un nuevo concurso y seguramente habrá dos más, tal como recordó el anterior responsable socialista de esta área, Marc Armengol. «Nosotros lo habíamos dejado encaminado», aseguró Armengol. «Es el día de la marmota», se quejó la jefa del PP, Marta Giménez. «No nos satisface nada, pero esperamos que sea la última», deseó Forn. En todo caso, con los votos contrarios del PP y Vox y la abstención de PSC y ERC, el equipo de gobierno de Tot per Terrassa y Junts consiguió seguir ganando tiempo.

La unanimidad llegó con la moción del PP para adaptar a la Ordenanza de Movilidad la nueva regulación estatal que obliga a los propietarios de patinetes y bicicletas eléctricas a disponer de un seguro. La jefa del grupo Giménez no tuvo mucha necesidad de justificar que, a partir de ahora, se incorpore como infracciones muy graves que el usuario no disponga de este seguro o que haya manipulado mecánicamente el vehículo para darle más potencia, refiriéndose sobre todo a estos patinetes que proliferan en cualquier vía pública. En el tercer punto de la resolución, se especifica que «cuando la inmovilización se produzca sobre un vehículo de movilidad personal (VMP) o bicicleta eléctrica, estos serán requisados por parte del agente, solicitando su retirada por parte del servicio municipal de grúa y llevando el vehículo al depósito municipal». Aprobada la moción, solo queda definir el importe de la multa para retirar el vehículo del depósito.
Una dotación de 50.000 euros de subvenciones para limpiar pintadas
En cuanto a cuestiones de incivismo, también se aprobó por unanimidad las bases para subvenciones de limpieza de pintadas en fachadas particulares, más allá de la limpieza que efectúa el Ayuntamiento en paredes de equipamientos públicos. Lo que lamentó la oposición es que la dotación inicial, revisable con más de una convocatoria al año, solo sea de entrada de 50.000 euros. Terminó saltando, una vez más para el próximo pleno de noviembre, la actualización de la Ordenanza de Convivencia a las nuevas leyes para consensuar mejor la setentena de enmiendas que había presentado el PSC.
Un acuerdo unánime proveniente de la junta de portavoces fue instar al Ayuntamiento y a la Generalitat a defender a los trabajadores de la empresa de motos de trial GasGas de la avenida de Santa Eulàlia que se quedan sin trabajo porque la casa matriz KTM ha anunciado en la prensa austríaca que se lleva su fabricación a su país, dejando Terrassa solo como punto comercial. El departamento de Empresa y Trabajo, por eso, aún no tiene constancia del expediente de regulación, según explicó a MónTerrassa su consejero, Miquel Sàmper.
En la Casa Alegre de Sagrera, por otra parte, hay necesidad de actuar con carácter de urgencia «por la afectación fúngica del espacio y los bienes donde están depositados parte de los depósitos museísticos del Museo de Terrassa», según daba cuenta un decreto de alcaldía. El teniente de alcalde de Cultura, Joan Salvador, le respondió al concejal Forn que se comprometía por escrito a detallar cuál era la magnitud de esta afectación. Salvador también pidió que, a título póstumo, se otorgue la medalla de la ciudad a Joan Casals, músico y organista terrassense fallecido el pasado 2 de octubre.
Disputa en torno a una decisión del Consejo Municipal de Medio Ambiente
De momentos de tensión, como suele ser habitual en las intervenciones de la jefa de Vox, Alicia Tomás, se volvieron a vivir en este pleno. Pero más apaciguados. Fue cuando Tomás pidió que constara como una vulneración del reglamento el calificativo de «xenófoba» que le proferió el socialista Armengol durante el debate de la ZBE. Este, para rebajar la crispación, explicó que no lo había dicho «a nivel personal, sino a nivel general» del partido de Vox.

Pero el encontronazo inesperado fue entre el portavoz de gobierno Cardona y Forn. Este había presentado por escrito una demanda en el turno final de ruegos y preguntas. Se trataba de interrogar por qué en el último Consejo Municipal de Medio Ambiente no se había tenido en cuenta la decisión por mayoría (13 votos a favor; 1 abstención; 3 votos en contra) presentada por la asociación de uso de la bicicleta Biter que el Ayuntamiento se replantee la construcción de un nuevo aparcamiento en el subsuelo del Portal de Sant Roc. Cardona, con una respuesta que llevaba por escrito, fue muy contundente: «Lamento sinceramente que Esquerra Republicana nos quiera acusar de menospreciar una entidad o un consejo. Nunca menospreciaremos las opiniones ni las reflexiones de entidades, personas o grupos políticos aunque no coincidan con nuestra visión. Dicho esto, es importante recordar que el papel del Consejo Municipal de Medio Ambiente es un órgano deliberativo y propositivo, no ejecutivo. Sus decisiones son recomendaciones para el Ayuntamiento, no acuerdos vinculantes». Y, a continuación, el teniente de alcalde de Territorio detalló lo que le cuesta a la ciudad el mantenimiento del antiguo aparcamiento del Portal de Sant Roc hasta que no se rehabilite y que se eleva a 60.000 euros anuales.
En su intervención, Forn reiteró la oposición de su grupo a la construcción de un nuevo aparcamiento en este céntrico portal de la ciudad, pero sobre todo se quejó del papel que se deja a los consejos de participación. «A nosotros lo que nos preocupa es este valor y este menosprecio que consideramos que tienen por los consejos consultivos y participativos y por la opinión de la ciudadanía», espetó. La réplica de Cardona, esta vez improvisada y visiblemente aún más enfadado no se hizo esperar: «Lo que me está pidiendo es que enterremos este proyecto y que la ciudad pase diez años con un aparcamiento cerrado y un gasto de 60.000 euros anuales. Le pido responsabilidad porque usted ha estado en el gobierno en el mandato pasado y en este. Este proyecto se ha votado en este pleno y le pido que respete y no menosprecie la legitimidad democrática de los 27 representantes de la ciudadanía».
Cuando tuvo la ocasión de volver a hablar por otro tema, Forn quiso calmar los ánimos asegurando «legitimidad total a este pleno y a todos los representantes municipales, pero también legitimidad a la ciudadanía y a los consejos de participación». Un intercambio que no está lejos de la dificultad del equipo de gobierno con ERC para que vuelva a facilitar, de entrada, la aprobación de las ordenanzas en el pleno extraordinario de los presupuestos de este lunes.

