Agentes de la Policía Municipal de Terrassa han llevado a cabo estos días una formación específica vinculada al trato con animales. Ha sido una jornada organizada por el cuerpo de seguridad local y de carácter interno, que ha contado con la colaboración del Servicio de Etología de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y del Centro de Atención de Animales Domésticos (CAAD) de Terrassa.
El inspector Marc Pintor ha explicado a MónTerrassa que la actividad se ha distribuido en dos partes: una teórica y una práctica. En la primera parte, los agentes han podido conocer cuáles son los principales signos del comportamiento canino, cómo interpretar, por ejemplo, cuando un animal está asustado, tiene miedo o se encuentra desorientado; también reconocer si el perro muestra un comportamiento agresivo e, incluso, anticiparse al hecho de que pueda llegar a morder. Los profesionales veterinarios de la UAB les han enseñado diferentes técnicas para reaccionar a situaciones imprevistas.

Técnicas de autoprotección en casos de perros agresivos
Por otro lado, en la parte práctica, los agentes se han trasladado a las instalaciones de la protectora. Con la ayuda de voluntarios del servicio, y de algunos de los perros que se encuentran allí, se les ha enseñado maneras de poder atar al animal con seguridad, tanto para ellos como para el propio perro; tácticas para tranquilizarlo o someterlo sin daños; y cómo autoprotegirse en el caso de que el animal termine revolviéndose y los ataque cuando lo quieren coger. «La idea es tener una formación sobre todo de autoprotección frente a casos de agresividad, y poder realizar una recogida e intervención segura», resume Pintor.
Esta ha sido la primera sesión, pero está previsto organizar al menos una segunda a principios del próximo año. Por la casuística de la formación, ha requerido hacer grupos reducidos, y por eso, en esta solo han participado una veintena de agentes, principalmente, de la División Territorial del cuerpo, que son quienes pueden encontrarse de forma más habitual en circunstancias como las descritas. Aunque la Policía Municipal de Terrassa no es la encargada de recoger animales perdidos o abandonados, sí intervienen cuando hay riesgo de que el perro muerda a las personas o que se encuentre encerrado en algún lugar y muestre agresividad. También cuando se les avisa por situaciones de posible maltrato o cuando por otros motivos ajenos a ellos, los animales se encuentran inmersos en una intervención policial. «Es una necesidad que los agentes hemos detectado, y por eso hemos querido resolverla».
«Esta actividad, viene a complementar todas las acciones que estamos realizando relacionadas con el Bienestar Animal. Tenemos ya un protocolo normalizado de trabajo, mucho trabajo realizado en temas de maltrato, seguimiento, etcétera. Queremos ser proactivos, y nos faltaban herramientas para saber qué hacer cuando un perro no se deja coger o es agresivo», ha recalcado el inspector.
