Ona Martínez es uno de los nuevos regidores de Esquerra Republicana de Catalunya en el Ayuntamiento de Terrassa. Como el resto, tomó posesión en el pleno municipal del 17 de junio. Aquí, responde a 15 preguntas de
Quién es Ona Martínez?
Soy madre de la Eloi y, actualmente, soy de Teniente de alcalde de Proyección de la ciudad. Graduada en Comunicación Audiovisual y máster en Comunicación política e institucional, he trabajado en el mundo de la producción audiovisual y como técnica de comunicación. Culé de piedra picada, soy todavía más fan del baloncesto que del fútbol. Hago pilates para desconectar la mente y conectar con el cuerpo y todo el mundo que me conoce sabe que me encanta compartir unas cervezas en una terracita con amigos.
Como llega a la política? La convencen o desde siempre le había interesado?
La política me interesa desde que tengo uso de razón, gracias a mis dos abuelas. Soy un poco idealista. Y hace muchos años que milito con la firme convicción que, haciéndolo, podemos mejorar un poco nuestro entorno y el mundo.
Por qué esta opción política? Qué lo atrae del partido donde es.
Pues es fácil y natural: porque soy de izquierdas, republicana, independentista y muy orgullosa de ser egarense!
Cuando le dicen que va a la lista, que piensa? Cómo le comunican.
El 2019 di el paso de ser candidata de la Joventut Republicana e Isaac decidió confiar en mí para ir en lugares de salida. Le debo muchos aprendizajes, a Isaac! Cuando entras al transatlántico municipal hace mucha impresión, no lo negaré, pero los últimos 4 años han sido de un crecimiento personal inmenso y creo humildemente que hemos puesto las bases de muchas transformaciones en la ciudad. Y, en este contexto, decidí dar un paso adelante más, con convicción y mucha ilusión, para encabezar el proyecto. No fue una decisión sencilla, claro, pero estoy convencida que hacen falta nuevos liderazgos y que tenemos el mejor proyecto para continuar haciendo avanzar Terrassa!
Y que se siente cuando ve los resultados y sabe que ocupará una silla en la sala de plenos del Ayuntamiento.
Esto no va de sillas, sino de un proyecto colectivo. Y es evidente que esta vez no podía estar contenta de ninguna manera. Fue una noche muy dura… Tenemos que reconectar con la gente y tengo toda la fuerza y la confianza del equipo para remangarme y hacerlo.
Que puede aportar personalmente? Y que cree que puede aportar su partido?
Visión y relato. Sabemos de donde venimos, donde somos y hacia donde vayamos. Sabemos porque hacemos las cosas y sabemos que es imprescindible trabajar desde todo por todas partes para Terrassa y conectarla en el Vallès, en el país y en el mundo. Ah, y mucha, mucha, mucho trabajo para ponernos junto a tantos egarenses que quieren avanzar más rápido para vivir en una ciudad todavía más moderna.
Se ve mucho años en la sala de plenos? Será ya su vida o es solo un paréntesis?
Tengo claro que haré política siempre, es parte de lo que soy y me apasiona. Desde la calle, desde la militancia, desde las instituciones… Desde donde sea más útil. Y tengo claro que ahora estoy donde puedo ser más útil y que esto es solo una etapa de mi vida.
Como ve la distribución de regidores y regidoras después de las elecciones? Le sorprendieron los resultados?
Son unos resultados muy duros y negativos por la ciudad. La extrema derecha y la derecha extrema entran con mucha fuerza al Pleno municipal… Cómo no nos tendría que preocupar… Vienen tiempos muy complejos y nos piden la máxima responsabilidad a todos y a todas. Por eso hemos firmado el Pacto de gobierno con Txt y Junts: pensando siempre en Terrassa. Hacía falta un gobierno fuerte y estable.
Tenga la responsabilidad que tenga, cuál cree que es la prioridad de Terrassa en los cuatro años próximos? Y a largo plazo?
La ciudad cada vez tiene más personas, entidades o empresas que piensan en una nueva ciudad, más moderna, más dinámica, más universitaria y con todavía más calidad de vida… Más homologable en las ciudades medianas europeas. Una Terrassa a la altura del siglo XXI. Y esta tiene que ser la prioridad: ponernos junto a todos estos nuevos liderazgos para hacer avanzar la ciudad. Aterrizándolo en los próximos 4 años, por ejemplo, tenemos que hacer brillar mucho más aquello que somos y los potenciales que tenemos. Tenemos un tejido deportivo y cultural único que nos identifica como terrassencs y que, a la vez, nos proyecta afuera; tenemos un campus universitario urbano también único que además genera talento año tras año; tenemos una historia industrial única que se rezuma en nuestras calles. Todo esto lo tenemos que unir, entender y explicarlo adentro y afuera porque es un potencial cohesionador, tractor de empresas y talento, generador de trabajo, etc.
Un deseo.
Que todos nuestros hijos, los hijos de Terrassa, vengan de donde vengan, hablen la lengua que hablen, recen a quién recen y quieran a quién quieran, puedan crecer y vivir en Terrassa con las mismas oportunidades. Esta es la ciudad que deseo para Eloi, mi hijo. Una ciudad de derechos, de libertad y de oportunidades.
Un lugar de Terrassa donde se la podría encontrar? Y el mejor lugar que tenemos en la ciudad.
Por las calles, seguro! Me gusta ir andando a todas partes, si la agenda me lo permite. Y me cuesta mucho decir un solo lugar… A nivel simbólico, las chimeneas, sin lugar a dudas! Pero donde me pasaría horas está en el Parc de Vallparadís, qué suerte que tenemos de tenerlo!
Una fiesta o acontecimiento de Terrassa donde nunca marra.
La Fiesta Mayor y el Picnic Jazz.
Un compañero de legislatura (no del mismo partido) con quien querría ir a hacer un café.
Hay unos cuántos que me gustarían… Voto por un café de regidoras!
Y un compañero (de su partido o no) que cree que puede sorprender en este mandato.
La que hubiera sorprendido más a todo el mundo, desgraciadamente, no ha podido entrar.
Una palabra con la cual se definiría como persona. Y por qué?
Trabajadora, autoexigente y empática. Porque quién me conoce ya sabe que pongo muchas horas, todas las que hagan falta, y que a quienes más exijo (a menudo, incluso demasiado) es a mí misma. Somos servidores públicos y para mí es esto: remangarnos y, a la vez, ponernos mucho en el lugar de las personas, piensen el que piensen.