De Terrassa a Piconcillo, 1.000 kilómetros en bici por una buena causa. Esto es lo que ha hecho el terrassense Alejandro Cabezas, quien este mes de octubre cumplió con el reto que se había fijado para visibilizar tres entidades que luchan por recaudar fondos para la investigación y cuidado de enfermedades minoritarias, y que están estrechamente vinculadas con nuestra ciudad.
Este lunes, día 17 de noviembre, el alcalde Jordi Ballart, acompañado del concejal de Deportes, Alberto Muñoz, se reunió con el deportista para hablar de su aventura. Pero también porque Cabezas tenía una misión: entregarle un obsequio de la alcaldesa de Fuente Obejuna, Silvia Mellado. Y es que este viaje sobre dos ruedas no solo ha servido para dar voz -muy necesaria- a la labor que realizan las asociaciones de Sanfilippo Barcelona, Todos contra la Histiocitosis y Cors Lluitadors de Duchenne, también ha tomado un simbolismo adicional porque el ciclista ha establecido lazos de hermandad entre los dos municipios.

Intercambio de obsequios y muestras de hermandad
Antes de comenzar el viaje, el alcalde Jordi Ballart y miembros de las asociaciones recibieron al deportista. El alcalde escribió una carta dirigida a Mellado en la que expresaba su voluntad de unir las dos localidades en un gesto de fraternidad. Esta misiva fue debidamente entregada cuando Cabezas llegó a Piconcillo, pedanía del municipio de Fuente Obejuna, en la provincia andaluza de Córdoba. La carta fue leída en la sala de plenos del Ayuntamiento, y como muestra de entendimiento y correspondencia, la alcaldesa le devolvió la carta con un pequeño obsequio que ahora ha llegado a destino. Además, al ciclista se le hizo entrega de varios regalos, «como muestra de nuestro apoyo y reconocimiento a este gesto solidario y a la causa que representa».

Alejandro Cabezas fue recibido a finales del mes de octubre por concejales y miembros de la corporación local de Piconcillas. El terrassense entró en la plaza Lope de Vega entre aplausos de familiares y vecinos que no quisieron perderse esta insólita hazaña. Así ponía fin al recorrido de los más de mil kilómetros que separan las dos localidades. En el salón de Plenos, pudo contar su aventura y los motivos que lo llevaron a emprenderla. Un viaje que tenía pensado desde hacía tiempo, pero que se decidió a hacer después de jubilarse.


