Este martes, día 5 de noviembre, el Aula Magna de La FACT Cultural ha acogido la presentación del libro «Agustí Bartra & Joan Roura-Parella. Correspondencia 1946-1982«, a cargo de Oriol Ponsatí-Murlà, y editado por la Fundació Torre del Palau, con la colaboración de la Diputación de Girona. El acto contó con la participación de Jaume Aulet, encargado del prólogo y participante activo en la edición del libro, el poeta y dramaturgo Feliu Formosa, y Màrius Massallé, representante de la fundación. Lamentablemente, por enfermedad, se tuvo que excusar la presencia del curador.
Massallé destacó la importancia para Terrassa de poder editar este epistolario. «Para nosotros es importantísimo, porque nos completa la figura de Agustí Bartra, hijo predilecto, y que lo queremos aquí». En el prólogo, Aulet recalca la importancia del material que tenemos en el Archivo Histórico, presenta a los dos protagonistas y destaca algunas cosas que se dicen en las cartas que son especialmente interesantes. «Por ejemplo, en el momento del regreso al exilio, Bartra le explica a Roura-Parella por qué viene a vivir a Terrassa; o en otro momento, explica cómo entiende él la tradición poética catalana, sobre Verdaguer, Maragall o Carné».
Por su parte, Feliu Formosa recordó la relación personal que tuvo con Bartra, destacando algunos de los episodios más relevantes, por ejemplo, agradeciendo la ayuda que le dispensó en la enfermedad y muerte de su primera esposa. Formosa manifestó su sorpresa porque en el epistolario «de la vida cotidiana en Terrassa, Bartra no habla nada», aunque también resaltó que menciona a Jaume Canyameres, una de las piezas clave en el regreso del escritor a casa. También recalcó la «gran diferencia en la cantidad de cartas de uno y otro, ya que por 149 misivas de Roura, solo encontramos 52 de Bartra, lo que nos hace pensar que hay varias que se han perdido».

«Para conocer a un autor, los epistolarios son esenciales»
«Estas cartas son legibles, aptas para todos, aunque es cierto que los que conocen bien la obra de Bartra o de Roura-Parella podrán sacarles mucho más partido. Las opiniones que tienen sobre el exilio o sobre la llamada transición democrática española son muy interesantes. Los poetas son visionarios, ven lo que pasará y lo explican», apunta Aulet a MónTerrassa.
El profesor y escritor de Terrassa subraya que «para conocer bien a un escritor se le tiene que leer. Su obra literaria, evidentemente, pero si se quiere conocer a fondo, toda la documentación que genera es un material fundamental para acabar de comprenderlo. Y los epistolarios son esenciales». Además, recuerda que Bartra no puede desligarse del hecho de que escribir es su profesión. «Bartra a partir de un momento comenzó a guardar copia de las cartas que enviaba, lo cual nos ha permitido reconstruir más fácilmente su historia, y al mismo tiempo esto significa que él era consciente de que estas epístolas tenían un valor literario».
El libro permite, pues, conocer un poco al autor de Haikús d’Arinsal o Els himnes, pero aún quedan muchas cosas en un cajón esperando su turno. «En el Archivo tenemos epístolas inéditas de Pere Calders, Antoni Ribera, Joan Fuster… y algunas extensas, que algún día habrá que publicar», sentencia Aulet.
