Detenido un depredador sexual de menores vigilado en Terrassa. Este martes, día 25 de noviembre, la Guardia Civil ha comunicado la detención de un hombre de 39 años como presunto autor de los delitos de agresión sexual, corrupción de menores, detención ilegal, inducción al abandono del domicilio de una menor y desobediencia a agentes de la autoridad. El hombre ha pasado a disposición judicial.
Según informa la Benemérita en un comunicado, la investigación se inició a raíz de una denuncia por desaparición presentada en la comisaría de la comunidad autónoma de La Rioja. Familiares alertaban que no lograban contactar con la chica, menor de edad. En las investigaciones preliminares, los agentes descubrieron, analizando varias conversaciones extraídas de su teléfono móvil, que la víctima había recibido mensajes de contenido sexual, explícito y agresivo, por parte de un hombre que había contactado con ella a través de las redes sociales.
Entre los mensajes que el adolescente había recibido había comentarios sobre la diferencia de edad, y mostraba una «actitud sexualizante y forzosa». Asimismo, había enviado videos con contenido sexual violento y de dominación.

Agresión sexual a menor en Terrassa
Con este hallazgo, agentes del Instituto Armado pertenecientes a la Unidad Orgánica de Policía Judicial iniciaron la búsqueda urgente de la chica mientras realizaban, al mismo tiempo, gestiones para localizar al sospechoso. Fue así como se constató que esta persona ya tenía una orden judicial en vigor, de control específico, dictaminada por el Juzgado de Instrucción número 4 de Terrassa. El motivo era una presunta agresión sexual a una menor de 15 años. Según el registro de empadronamiento, el individuo ahora figuraba como residente en Granada.
Teniendo la identificación del principal sospechoso, los agentes contactaron con él vía telefónica. El hombre reconoció que estaba con la menor desaparecida, pero se negó a informar de dónde se encontraba y a colaborar. La Guardia Civil, sin embargo, logró su localización, y fue así como en un operativo específico se detuvo al individuo y se devolvió a la víctima a sus padres. Se informa que en el registro del lugar donde se alojaba el detenido se localizaron varios objetos de carácter sexual.
Ganarse la confianza de las víctimas
Desde el cuerpo policial apuntan que este tipo de personas «utilizan las redes sociales para contactar con adolescentes y ganarse su confianza, con el objetivo de manipularlos de manera progresiva y engañosa». A menudo, logran que las víctimas les envíen material pornográfico, con el cual pretenden «normalizar conductas sexuales inadecuadas, consiguiendo que las menores acepten este tipo de conversaciones como algo habitual». Al final, lo que buscan, sin embargo, es organizar un encuentro físico y mantener relaciones sexuales con ellas.


